domingo, 1 de junio de 2014

junio 01, 2014
JARTUM, Sudán, 1 de junio.- Una sudanesa cristiana de 27 años condenada a muerte por apostasía será liberada "en los próximos días", anunció un responsable de Relaciones Exteriores del Gobierno sudanés.

Meriam Yahia Ibrahim Ishag (o Mariam Jahia Ibrahim Ishak) fue condenada a muerte el 15 de mayo de 2014 en virtud de la ley islámica vigente en Sudán desde 1983, que prohíbe las conversiones, lo que suscitó una oleada de indignación. El pasado martes dio a luz una niña en prisión.

Foto de la boda de Meriam y Wadi (2011). (Facebook)

"La mujer será liberada en los próximos días según los procedimientos legales que serán aplicados por el poder judicial y el ministerio de Justicia", declaró Abdala Al Azraq, un subsecretario de la cancillería sudanesa, contactado telefónicamente en Londres por la AFP, sin dar más explicaciones, en particular acerca de si las acusaciones serán abandonadas.


Reino Unido pidió revisar condena

Pocas horas antes el primer ministro británico, David Cameron, había hecho un llamado al gobierno sudanés para que anulara la pena de muerte. El 19 de mayo el gobierno británico convocó al encargado de negocios sudanés a raíz de esa condena.

Según Amnistía Internacional, Ishag fue criada en el cristianismo ortodoxo, la religión de su madre, dado que su padre, musulmán, estuvo ausente durante su infancia. Posteriormente, la joven se casó con un cristiano de Sudán del Sur.

Normas islámicas

Según la interpretación sudanesa de la sharia (ley islámica), una musulmana no puede casarse con un no musulmán.

Meriam Yahia Ibrahim Ishag (su nombre cristiano) también fue condenada a cien latigazos por "adulterio".

Antes del veredicto, un jefe religioso musulmán intentó convencerla de volver al islam, pero la mujer dijo al juez: "Soy cristiana y nunca he cometido apostasía".

"Le dimos tres días para abjurar de su fe pero usted ha insistido en no volver al islam. La condeno a la pena de muerte en la horca", declaró entonces el juez Abas Mohamed al Jalifa. (AFP)