jueves, 5 de junio de 2014

junio 05, 2014
BOISE, Idaho, 5 de junio.- La ciudad en la que vivía el soldado estadunidense Bowe Bergdahl, liberado este fin de semana en Afganistán tras pasar cinco años en manos de combatientes talibanes, canceló la fiesta de bienvenida por razones de seguridad.

La localidad de 8 mil habitantes en el estado de Idaho adujo no contar con la infraestructura suficiente para recibir al público que aguardaría la llegada del soldado.

El sargento Bowe Bergdahl antes de caer en manos de los talibanes.

La liberación de Bergdahl desató una fuerte polémica en el país debido a que se pactó a cambio de la liberación de cinco prisioneros de Guantánamo y no fue sometida a la aprobación del Congreso. Además, hay quienes acusan al soldado de haber abandonado su puesto en Afganistán.

Enlace a ¿Héroe o desertor? Las dudas sobre el soldado de EE.UU. canjeado por talibanes


El secretario de Defensa estadunidense, Chuck Hagel, subrayó que es necesario esperar los resultados de las investigaciones pertinentes. "El Ejército llevará adelante una amplia investigación sobre todas las circunstancias que rodearon la desaparición del suboficial Bergdahl", instó ayer miércoles, frenando las especulaciones.

Bergdahl era el único prisionero de guerra estadunidense en Afganistán. A cambio de su libertad, Estados Unidos extraditó los prisioneros pactados a Qatar.

En tanto, filas talibanes publicaron este miércoles un video en el que se ve la entrega del soldado a las tropas estadunidenses.

Bergdahl está siendo atendido en un centro hospitalario de Alemania. Aún no se ha informado cuándo viajará de regreso a su país. (DPA)