ESTADOS UNIDOS, 28 de mayo.- A pesar de que eran la pista perfecta de lo que estaba por venir, los videos que Elliot Rodger subió a la página YouTube antes de cometer la matanza en Santa Bárbara, nunca fueron vistos por las autoridades de California. Y aunque ya agentes de la Policía habían tenido contacto con Rodger para saber sobre su estado mental, no tenían idea que el joven usaba esa página de Internet para contar sus macabros planes.
No fue sino hasta después de la masacre del viernes, en la que Rodger apuñaló a tres jóvenes que compartían un apartamento con él y le disparara a dos chichas y otro estudiante cerca de la universidad, que las autoridades supieron de las grabaciones en las cuales contaba los motivos que tenía para matar a tanta gente y luego quitarse la vida.
Algunos medios reportaron que los padres del atacante sí habían alertado a las autoridades sobre el contenido de las grabaciones, pero al parecer nunca fueron tomadas muy y en serio, y luego, tras la matanza del viernes, ya era demasiado tarde.
El portavoz de la Policía del Condado de Santa Bárbara, Kelly Hoover, confirmó que los agentes conocieron de los videos después de la matanza.
Las acciones de Rodger vuelven a poner en la palestra pública el tema de la salud mental, y la necesidad de que las personas que hayan presentado algún tipo de problema, a pesar de que no tengan historial de violencia, sean evaluadas a fondo.
En una oportunidad ya los agentes habían sido llamados a la casa del joven, pero éste logró convencerlos de que estaba bien y no tenía ningún problema. (El Diario NY)
