sábado, 26 de abril de 2014

abril 26, 2014
ROMA, 26 de abril.- Dos días antes de canonizar a Juan XXIII y a Juan Pablo II en una ceremonia histórica, Francisco definió a los dos futuros santos como "un don" para la Iglesia. Mientras tanto, miles de peregrinos siguen llegando a Roma para el "día de los cuatro papas ", como fue bautizada la doble canonización, con dos pontífices muertos y dos vivos, si se confirma la asistencia de Joseph Ratzinger .

Lo hizo al enviar un mensaje a los habitantes de Bergamo, ciudad del no rte de Italia donde nació Angelo Roncalli, por un lado, y por otro, a los de Polonia, de donde era oriundo Karol Wojtyla.

Día histórico para la Iglesia: dos Papas Santos y otros dos en la Plaza de San Pedro para la celebración


"Los invito a agradecer el Señor por el gran don que Su Santidad ha sido para la Iglesia universal y los aliento a custodiar la memoria del terreno en el cual ésta germinó: un terreno hecho de fe profunda vivida en lo cotidiano, de familias pobres pero unidas por el amor del Señor, de comunidades capaces de compartir en la simplicidad -les escribió el Papa a religiosos y a fieles de la diócesis de Bergamo- pero también a aquellos que no pertenecen a la Iglesia y a la entera comunidad civil."

"Claro, desde entonces el mundo ha cambiado y son nuevos los desafíos (...), sin embargo, esa herencia puede inspirar aún hoy una Iglesia llamada a vivir la dulce y reconfortante alegría de evangelizar, a ser compañera del camino de cada hombre", agregó.

En su videomensaje a los polacos -que ayer seguían llegando en masa a Roma- en tanto, Francisco agradeció "el don de Juan Pablo II".

Se espera a un millón de fieles en San Pedro


"Todos hemos sido enriquecidos por este don. Juan Pablo II sigue inspirándonos. Nos inspiran sus palabras, sus escritos, sus gestos, su estilo de servicio. Nos inspira su sufrimiento vivido con esperanza heroica, su total encomendarse a Cristo", dijo.

Además, hizo suyas las palabras dichas por Benedicto XVI durante su beatificación, el 1° de mayo de 2011, cuando definió al papa polaco como "un gigante" que "abrió a Cristo la sociedad, la cultura, los sistemas políticos y económicos" y que ayudó a los cristianos "a no tener miedo".

En víspera de la histórica canonización, a la que se espera que asista un millón de personas, entre ellas jefes de Estado, los reyes de España, jefes de gobierno y delegaciones de todo el mundo, hervían los preparativos.


En la fachada de la Basílica de San Pedro ya habían sido colgados los dos tapices con las imágenes de los dos futuros papas santos. Y la zona, donde terminaban de colocarse varias pantallas gigantes, había sido tomada por asalto por peregrinos y turistas de todo el mundo. También el resto de la ciudad se vio invadida por ejércitos de personas que se desplazaban por los lugares más emblemáticos de la ciudad entonando cánticos religiosos.

"Sí, vine por Juan Pablo II. Nunca me voy a olvidar cuando de chica lo vi en su visita a Buenos Aires y le fuimos a cantar a los jardines de la Nunciatura y ¡en polaco!", dijo a LA NACION Mercedes Recondo, que llegó ayer por la mañana junto a su marido desde Buenos Aires.

EN DEFENSA DE WOJTYLA

Para saciar la sed de información de la legión de periodistas llegados desde todo el mundo para cubrir "el día de los cuatro papas", por el Vaticano desfilaron figuras muy cercanas a los futuros santos.

Entre ellos, el histórico vocero de Juan Pablo II, el español Joaquín Navarro Valls, que en una conferencia de prensa destacó que podían verse las tres características de "verdadera santidad" de Karol Wojtyla en cómo rezaba, trabajaba y sonreía. Ante una pregunta, Navarro Valls defendió enérgicamente al papa polaco de quienes lo acusan de haber ignorado las denuncias contra el fallecido fundador de los Legionarios de Cristo, Marcial Maciel. Maciel, abusador serial y pedófilo, recién fue castigado por Benedicto XVI en 2006.

"Ese cáncer no lo entendió él, pero no lo había entendido nadie. Comenzó en Estados Unidos y en casos aislados y sobre casos ocurridos 20 o 30 años antes. Después creció. Pero Juan Pablo enseguida se preocupó mucho", dijo Navarro, que aseguró que bajo el pontificado de Wojtyla comenzó la investigación sobre la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre Maciel.

LOS DOS FUTUROS SANTOS


Serán canonizados mañana, en una masiva ceremonia
Angelo Roncalli - Juan XXIII
Conocido como "el papa bueno", su pontificado duró sólo siete años; es considerado el padre de la Iglesia contemporánea
Karol Wojtyla - Juan Pablo II
También llamado "el papa viajero", llevó la Iglesia a cada rincón del mundo. (Elisabetta Piqué / La Nación)