sábado, 15 de febrero de 2014

febrero 15, 2014
BAJA CALIFORNIA, México, 15 de febrero.- Un hombre que amenazaba con lanzarse desde una torre de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) paralizó la Zona Río de Tijuana durante unas cinco horas este viernes 14.

Foto del suicida tomada por José Evaristo Zepeda (@jevaristoz)

“Sí me voy a aventar porque aquí no me ha ido nada bien, me la he visto bien dura”, advirtió Giancarlo Constancia Sarabia Ibasurto, de 29 años, ante la sorpresa de ciudadanos, policías y elementos de rescate, ayer por la mañana.

Y cumplió.


Aproximadamente a las 5:00 horas el joven ingresó a la subestación por el estacionamiento de los empleados de la CFE, según los diarios Frontera y El Mexicano.

Uno de los guardias de la CFE lo vio, pero Giancarlo corrió y escaló de inmediato la estructura metálica.

Apenas amanecía cuando transeúntes, automovilistas y personal de la paraestatal se percataron de la presencia del hombre en lo alto de una de las torres de la subestación ubicada en bulevar Cuauhtémoc y Vía Rápida Oriente.

Desde la antena, Sarabia Ibasurto gritó que era originario de Michoacán y que había sido deportado de Estados Unidos.

Agregó que en Tijuana le estaba yendo muy mal y que había decidido quitarse la vida el 14 de febrero.

Autoridades de los tres niveles de gobierno, elementos de rescate, bomberos, paramédicos y elementos del Ejército acudieron al lugar y resguardaron la zona.

Aproximadamente a las 7:00 horas empleados de la CFE cortaron el suministro de energía eléctrica en la torre para evitar que Giancarlo muriera electrocutado.

Parte de la Zona Río, la colonia Libertad y los semáforos de las avenidas aledañas se quedaron sin luz, lo que causó congestionamientos viales en esa parte de la ciudad fronteriza.

Por más de dos horas el Centro de Gobierno y el Palacio Municipal se quedaron sin electricidad. Diferentes dependencias tuvieron que suspender la atención al público, reportaron los diarios Frontera y El Mexicano.

Los bomberos conversaron con Sarabia Ibasurto y se enteraron de sus intenciones suicidas. Posteriormente, arribó una psicóloga de la Unidad Municipal de Asistencia Social con el fin de impedir que Giancarlo se quitara la vida.

Al transcurrir las horas decenas de personas se arremolinaron en el lugar para observar al hombre; algunas de ellas intentaron persuadirlo para que no se arrojara.

La psicóloga negoció con él por varios minutos pero no logró hacerlo desistir.

Finalmente el hombre se tiró de la torre, tras lo cual fue subido a una camilla y trasladado al Hospital General, donde falleció. (Proceso)