jueves, 27 de febrero de 2014

febrero 27, 2014
Carlos Loret de Mola Álvarez / 27-II-14

A El Pelacas estuvieron a punto de capturarlo en 2009 durante un aparatoso operativo en el fraccionamiento Bosque Real de la zona metropolitana de la ciudad de México.

Iba a bordo de un carro Audi, durante la persecución se cambió a una camioneta Ram y como los policías lo trataban de alcanzar en un Sentra se les escapó: bajó de su vehículo, subió una ladera de tierra y abordó otro coche que lo esperaba en la calle de arriba. Cuando se supo a salvo volteó hacia los policías, les hizo la seña obscena de los cinco dedos flexionados en escalerita y disparó al aire con un “cuerno de chivo”.


Se llama Daniel Fernández. Le apodan El Pelacas. En eso derivó su sobrenombre porque originalmente le decían El Akas por su fascinación por los fusiles de asalto AK-47, los “cuernos de chivo”.


Fue detenido hace quince días en el fraccionamiento La Vista Country Club de Puebla y de inmediato se difundió que era el secuestrador del ex candidato presidencial panista, el Jefe Diego Fernández de Cevallos, y que lo hizo por órdenes de Joaquín El Chapo Guzmán Loera.

En realidad, ninguna autoridad lo vinculó en ninguna declaración pública con el plagio más sonado de lo que va del milenio. El único testimonio que lo inculpa lo emitió un delincuente: Oscar Osvaldo García Montoya alias La Mano con Ojos.

La Mano dijo —quedó grabado en un video que luego divulgó la autoridad— que en el mundo del crimen todo se sabe, y que él supo que El Pelacas secuestró a Fernández de Cevallos.

Los cuerpos de élite de la PGR identifican a El Pelacas como un mercenario del crimen organizado, un hombre sin lealtades hacia sus patrones, que ha saltado de un cártel a otro. Según la averiguación previa, Daniel Fernández trabajó para Guzmán Loera, La Barbie, los Beltrán, Nueva Generación.

Cuando lo detuvieron, las autoridades le preguntaron sobre el secuestro del panista y les contestó que todo fue un invento de La Mano con Ojos para tratar de deshacerse de él, que era su adversario en el mundo de la droga. Agregó que el único secuestro que cometió fue el de los sobrinos del procurador de Aguascalientes, Felipe Muñoz, a quien quiso así castigar por un presunto incumplimiento tras un soborno, acusación que rechaza el funcionario. El amago derivó en decapitación.

Cuando arrestaron a El Chapo le preguntaron informalmente si había ordenado el secuestro de Fernández de Cevallos. Lo negó, según consta en los reportes de la Operación Gárgola elaborados por el área de Inteligencia Naval de la Marina y la Agencia de Investigación Criminal de la PGR.

Las autoridades federales que investigan este plagio nunca creyeron que Guzmán Loera y El Pelacas estuvieron detrás. Mantuvieron la hipótesis heredada por los cuerpos de inteligencia del sexenio anterior, en el sentido de que un grupo guerrillero es el responsable.

SACIAMORBOS

1. Tras El Chapo, el más probable que siga es La Tuta.

2. Errata al Saciamorbos de ayer: me refería al año 2013, la noche que fue detenida Elba Esther. Redacté sin querer 2014.