jueves, 26 de diciembre de 2013

diciembre 26, 2013
Identificado el gen que nos hace fisonomistas: es el elemento que codifica el receptor de la oxitocina, la llamada "hormona del amor", que desempeña un papel crucial en el vínculo entre madre e hijo y la relación de pareja. El descubrimiento, publicado en la revista PNAS de la Academia Americana de Ciencias, podría explicar por qué algunas personas son capaces de memorizar todas las caras que ven, mientras que otros (entre ellos los afectados por enfermedades como el autismo) tienen dificultades para reconocer a los amigos e incluso a familiares.

Una característica del autismo es la dificultad para reconocer a las personas que no tienen rasgos llamativos.

El autismo es la llave que llevó a descubrir la importancia de este gen, llamado Oxtr, en la creación de la memoria social. La investigación, coordinada por el University College de Londres, ha puesto bajo la lente a 198 familias británicas y finlandesas en el que se identificó a un niño autista. Cada componente de estas familias ha sido sometido al análisis de ADN y una serie de pruebas para comprobar su capacidad para reconocer la cara de las personas.

Los datos mostraron que una única variación en el gen Oxtr es capaz de influir sustancialmente en la capacidad de reconocer las caras. Esta variante genética ha sido identificada en un tercio de las personas analizadas en el estudio. El receptor de oxitocina había previamente demostrado ser esencial para la formación de la memoria social en roedores, en los que el reconocimiento se realiza a través del olfato y no de la vista: por lo tanto, esto hace pensar que el gen ha conservado su función durante la evolución. (La Repubblica / medicaldaily.com)