MÉRIDA, Yucatán, 6 de octubre.- La Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC), El Barzón, la Coalición de Organizaciones Democráticas (Coduc), la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) y la Coordinadora Nacional del Plan de Ayala (CNPA) se unieron para conformar el Frente Auténtico del Campo, con el propósito de reformar las políticas del campo y que los presupuestos efectivamente lleguen a los campesinos.
Fue instalada una representación de este frente en Yucatán, al que ingresaron unos 9 mil campesinos del Estado, afiliados a la Unta, que agrupa a unos 3 mil, 700 de El Barzón, 5 mil de la CIOAC y 700 del CNPA.
La propuesta de este frente es suscribir un nuevo pacto rural que modifique los actuales programas dirigidos al campo, a fin de que se privilegia a los grupos de productores más vulnerables, y no a los de capacidad comercial, como ocurre actualmente.
Federico Ovalle, dirigente nacional de la CIOAC, destacó que unidas las organizaciones campesinas pueden ejercer una mayor presión para poder incidir en las políticas públicas al campo.
“Tenemos el compromiso con los derechos de la gente que trabaja en lo rural y somos organizaciones autónomas de otros poderes, de los partidos políticos y no somos subordinados a ninguna otra organización; este frente se decidió el 15 de julio pasado y se procede a instalar los frentes estatales paulatinamente.
“Nuestra propuesta es un nuevo pacto rural, porque el modelo actual es lesivo; el capitalismo salvaje ha acabado con nosotros y no existe una verdadera política agropecuaria; queremos un nuevo pacto en el que el gobierno ponga en primer lugar la soberanía alimentaria y la producción nacional y abandone el modelo de exportaciones para que sea de producción, con énfasis en el Sureste”, dijo el ex diputado federal de origen zacatecano.Guillermo Cauich Durán, delegado de la UNTA en Yucatán, aseveró que el campo en la entidad se encuentra en el “campo de la ignominia”, solo promesas de apoyar y rescatar la actividad no se han concretado, ya que ni siquiera se han liberado los recursos del coejercicio para el campo y ya estamos en octubre.
“Es una burla que los más de 600 millones de pesos para el campo en Yucatán, que son en coejercicio de Sagarpa y el Gobierno del Estado, no hayan sido liberados; todo es una simulación; lo mismo ocurre con los sistemas de riego; en realidad con esas acciones se sigue priorizando la pobreza alimentaria, se privilegian las importaciones, somos dependientes en una buena cantidad de productos, en maíz, arroz, cerdo, frijol, en prácticamente todos los productos; el colmo es que somos como país el primer lugar en importación de leche; eso es una ofensa, es un insulto.
“No han cambiado las cosas, los presupuestos son cada vez mayores y no llegan los recursos; con el nuevo pacto se propone priorizar a los pequeños productores y rescatar la soberanía”, destacó.
Agregó que el olvido y abandono es a tal grado en el Estado, que las sesiones del Consejo Estatal de Desarrollo Rural son simulaciones, pues a las organizaciones campesinas no les dan entrada y, por lo tanto, no pueden incidir en las políticas o negociaciones de presupuestos.
“Estamos en el abandono y el olvido, exigimos que nos incluyan y también que nuestra voz se escuche”, remarcó.
El frente fue instalado por Olga Martínez Jiménez, representante de Coduc; Pedro Quijano, de El Barzón; Eduardo Pavón, del CNPA; Guillermo Cauich, de la UNTA y Tonatiuh Villanueva, de la CIOAC Yucatán. (Yucatán Informa)
