Los servicios especiales están entrando en poco a poco por el tejado de Westgate, pero es imposible aún acceder a las plantas inferiores y se desconoce el número de personas y víctimas que puedan encontrarse en ellas. Los terroristas (testigos hablan de rasgos somalíes, «con turbantes y ametralladoras y que hablaban en árabe») controlan las plantas bajas y en concreto uno de los establecimientos, el supermercado, donce tienen rehenes.
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| El Departamento de Estado norteamericano ha anunciado este sábado que varios ciudadanos estadounidenses han resultado heridos en el tiroteo que se ha producido en un centro comercial de Nairobi, que ha descrito como «un acto de violencia sin sentido». |
En las tiendas de estas plantas se encuentran un número desconocido de personas escondidas y a la espera de que la policía tome el control. La única española (de la que se tiene constancia) que se encontraba en el interior con su hija ya está fuera del centro comercial a salvo, se trata de un lugar muy frecuentado por europeos.
Los supervivientes que se encuentran en establecimientos cercanos a la puerta están saliendo poco a poco del centro comercial. «Un grupo armado con granadas y rifles comenzó a dirigirse al interior desde el parking. Dispararon indiscriminadamente. Hablaban en árabe y tenían rasgos somalíes», relata a ABC George Nonyengo, uno de los liberados.
«Nos pudimos parapetar en una de las tiendas. Disparaban a todo lo que se movía», Marcel Hale, ciudadano francés que era liberado tres horas después del ataque, tras esconderse con varios compañeros en un comercio cercano.
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| La milicia radical islámica somalí Al Shabab se ha atribuido la autoría del asalto armado al mall Westgate (en la foto) y afirma que ha matado a «más de cien» personas en represalia por la presencia de militares de Kenia en la misión de la ONU en Somalia. Además, Al Shabab asegura que no habrá negociaciones con los militantes que se encuentran en el interior del centro comercial. |
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| «El ataque de Westgate es solo una muy pequeña fracción de lo que lo s musulmanes experimentan en Somalia en manos de los invasores keniatas», ha tuiteado Al-Shabaab. (Reuters) |
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| El vicepresidente, William Ruto, ha ofrecido ya sus condolencias a las familias de los fallecidos y ha asegurado que harán todo lo posible para poner fin a esta situación y llegar hasta el fondo del asunto. «Los responsables y sus cómplices tendrán que rendir cuentas», ha afirmado, según recoge el diario keniano «The Standard». (Reuters) |
Según relataron testigos a Efe, una decena de individuos con atuendo tradicional árabe irrumpieron en el centro comercial de Westgate -uno de los más lujosos de la capital keniana- y abrieron fuego de forma indiscriminada. En la entrada del centro comercial se encuentran cuerpos de víctimas.
«Hemos conseguido evacuar a algunas personas (presentes en el centro comercial) por seguridad. Pedimos a los kenianos que eviten la zona mientras perseguimos a los criminales», dijo el ministro del Interior de Kenia, Joseph Ole Lenku, citado por la emisora de radio Capital FM.
La Policía, que tiene rodeado el centro comercial, ha desplegado vigilancia aérea en la zona, una de las más ricas de Nairobi, y ha cerrado al tráfico las calles que conducen al lugar del suceso. La policía ha pedido por Twitter que los canales de televisión abandonen el «streaming» en directo desde la zona del enfrentamiento.
En su cuenta de Twitter, el Ministerio del Interior keniano ha pedido calma a los ciudadanos a la espera de recabar más datos, y ha anunciado que divulgará pronto un comunicado sobre el incidente.
Testimonios de los supervivientes: «Era como una situación de guerra».
Los supervivientes que se encuentran en establecimientos cercanos a la puerta del cento comercial atacado en Nairobi están saliendo poco a poco del centro comercial. «Hombres con rifles y turbantes y de aspecto somalí», así es como definen muchos de los testigos a los terroristas que han atacado Westgate este sábado en Nairobi.
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| La oficina del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, ya ha subido a su página web el siguiente mensaje: «El Secretario General sigue de cerca y con inquietud el ataque del centro comercial en Nairobi». Ya ha hablado con el Presidente Uhuru Kenyatta y le ha expresado su preocupación, también le ha ofrecido su solidaridad a las autoridades keniatas a la hora de manejar el incidente. (Reuters) |
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| Empieza a verse movimiento de fuerzas de inteligencia extranjeras, entre ellas de Israel. Aún no se siente un total control de la situación, en las últimas horas no ha salido nadie y les tienen localizados en el interior con los rehenes. (Reuters) |
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| La BBC recoge el testimonio de algunos testigos que aseguran que el dilema de las fuerzas de seguridad en el interior es distinguir a los terroristas de los rehenes o personas escondidas en el centro comercial. (Reuters) |
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| Ante los rumores de una posible fuga de uno de los atacantes, David Kimaiyo (Inspector General de la Policía de Kenia) ha asegurado que no se ha escapado ninguno. Añade en su cuenta de Twitter que hay «uno de los atacantes herido y arrestado en el hospital y varios localizados». (Reuters) |
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| Según EP, el ejercito keniata ha tomado el control de las operaciones en el tiroteo que ha tenido lugar en el centro comercial Westgate. Dentro del mismo siguen los terroristas con un número desconocido de rehenes. |
«Nos pudimos parapetar en una de las tiendas. Disparaban a todo lo que se movía», Marcel Hale, ciudadano francés que era liberado tres horas después del ataque, tras esconderse con varios compañeros en un comercio cercano.
Varios supervivientes explican a ABC que los terroristas se dirigían a ellos y les preguntaban en árabe y acto seguido, ejecutaban a quien no les entendía (cosas como el nombre de la madre del profeta).
Arjen Westra pudo contar su experiencia a la BBC: «Estaba tomando un café y de repente empezó un tiroteo, la gente comenzó a gritar y gritar y algunas personas salieron de la cafetería en pánico». También explicó que es un centro comercial de prestigio y es habitual que muchas personas de clase media acudan a la hora del almuerzo así que «estaba muy lleno». Hay un gran supermercado al que la gente va a comprar para llevarse la comida fuera.
Surajit Borkakoty, también pudo hablar con la BBC y contar su experiencia: «Empezamos a escuchar tiros en la primera planta creemos y de forma muy seguida. Íbamos a salir de la cafetería, pero al final nos quedamos dentro, la gente corría de un lado a otro. El empleado nos dijo que nos escondiéramos todos en la cocina y allí nos metimos y bloqueamos la puerta con una gran nevera. 17 personas en esa habitación tan pequeña, llorando, durante casi dos horas y media y sin dejar de oír las armas de fuego. Era como una situación de guerra». (ABC / Spiegel)
