PROGRESO, Yucatán, 13 de agosto.- A dos días de la muerte del joven buzo Moisés Martín Ku Canul, quien fue embestido por un yate frente a las costas de Chicxulub Puerto el sábado pasado, las autoridades reconocen que no hay pistas para la identificación, tanto de la embarcación involucrada en los trágicos hechos, como tampoco de su propietario, pues el capitán y el marinero que llevaron a tierra al entonces lesionado dieron nombres falsos.
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| Manuel Jesús Ku Vivas, padre del joven. |
Lo que sí queda de manifiesto es la poca conciencia sobre el valor de una vida que presentaron estas personas, ya que, de haberlo acercado a tierra, en lugar de llevárselo a Uaymitún (se dice que regresaron a este sitio para que bajara la familia que se encontraba en la embarcación al momento del incidente), se hubiera ganado un tiempo importante.
Ku Canul presentaba importantes lesiones en la cabeza, glúteo y pierna, producto del contacto con la propela de la embarcación.
Según el padre del infortunado buzo, Manuel Jesús Ku Vivas, el incidente sucedió a las 11 de la mañana y lo entregaron a los cuerpos de emergencia de la SSP dos horas después, o sea, a las 13:00 horas.
Resultó que los elementos de la SSP y paramédicos que recibieron a Moisés en Uaymitún no se tomaron la molestia de corroborar la identidad de estas personas y detenerlas por tratarse de un hecho de sangre. Finalmente, por las lesiones que sufrió, el joven murió desangrado a las dos de la tarde.
Ahora resulta que el barco desapareció, al igual que los sospechosos involucrados, y tampoco se ha podido localizar la marina a la que pertenecía, ya que, al parecer, no existe bitácora de los despachos de ese día por parte de la Capitanía de Puerto.
Al respecto, el titular de la Capitanía General de Puertos, Carlos Ignacio Olivares Bueno, dijo que no se sabe a ciencia cierta si es correcto el nombre de la embarcación reportada (“Seas Fox”) y, por ende, tampoco se cuenta con número de matrícula. De hecho, se piensa que dicha leyenda podría ser una marca, de modo que existe la posibilidad de que varias embarcaciones la tengan.
El funcionario indicó que se localizó en una marina una embarcación con este nombre, pero su propietario afirma que no la ha desembarcado, por lo que a la familia de la víctima no le ha quedado más que interponer la denuncia correspondiente ante el Ministerio Público (MP) para que inicien las investigaciones del caso y se deslinden responsabilidades.
Quedaron en el desamparo la esposa del buzo, Reyna García, y sus dos hijos, Moises Manuel, de ocho años, y Reyna, de cinco. (SIPSE)
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