domingo, 16 de junio de 2013

junio 16, 2013

BAGDAD, 16 de junio.- Irak fue sacudido el domingo por varios atentados explosivos y fuego de armas al parecer coordinados que además de sembrar el terror dejaron al menos 51 muertos y decenas de heridos, en una ola de violencia que hace aumentar los temores de nuevos actos terroristas sectarios una década después de la invasión encabezada por Estados Unidos.

La violencia ha aumentado significativamente en los últimos meses en Irak, donde la cifra de muertos se ha elevado a niveles no vistos desde 2008. Casi 2,000 personas han perdido la vida desde comienzos de abril, entre ellas más de 180 este mes.

La intensificación del derramamiento de sangre es paralela al incremento de las tensiones sectarias, así como al aumento de las preocupaciones de que esta agitación es atizada por la guerra civil que se libra en la vecina Siria.

Uno de los atentados más sangrientos ocurrió en la noche, cuando un atacante suicida se hizo volar con explosivos en una cafetería llena de jóvenes en el vecindario predominantemente chií de al-Ameen, en el sureste de Bagdad. En el ataque perdieron la vida 11 personas y 25 quedaron heridas, según la policía.

El dueño de una tienda de ropa, Saif Hameed, de 24 años, veía la televisión en casa cuando escuchó la explosión en las cercanías y atestiguó que numerosos heridos eran subidos a las ambulancias.

"Parece que los terroristas están atacando en cualquier lugar que pueden, no importa cuál sea", afirmó. "Lo principal para ellos es matar a la mayor cantidad de iraquíes que puedan y mantener a la gente atemorizada", agregó.


Otro de los vehículos que explotaron.

El grueso de los vehículos cargados de explosivos estalló en zonas de mayoría chií y causaron la mayor parte de las víctimas fatales. Las explosiones afectaron unas seis ciudades y poblados en el sur y centro del país.

Nadie se adjudicó los atentados, pero tienen la marca de al-Qaida en Irak, que usa coches bomba, atacantes suicidas con explosivos y ataques coordinados, dirigidos principalmente contra las fuerzas de seguridad y miembros de la mayoría chií.

La embajada de Estados Unidos condenó los ataques y afirmó que estaba a lado de los iraquíes "que buscan vivir en paz y rechazan los actos cobardes de terrorismo como éste".

Estados Unidos retiró en diciembre de 2011 a sus últimos efectivos de combate de Irak, aunque un número reducido permanece como parte de la embajada para facilitar adiestramiento y ventas de armas.

Los estallidos del domingo comenzaron en la mañana con un coche bomba estacionado en la zona industrial de la ciudad de Kut; seis personas murieron y 15 resultaron heridas.

Otro vehículo cargado con explosivos estalló después en las fueras de la ciudad y estuvo dirigido contra trabajadores de la construcción. Cinco personas perdieron la vida y 12 quedaron heridas en estos hechos, según la policía. (AP / Reuters)

0 comentarios:

Publicar un comentario