SÍDNEY, Australia, 12 de noviembre de 2018.- La policía australiana ha detenido este domingo a My Ut Trinh, una mujer de 50 años acusada de colocar agujas de coser en fresas que se comercializaban en este país. La arrestada, una extrabajadora de una empresa del sector, se enfrenta a una pena máxima de diez años de cárcel, según ha informado el cuerpo policial. El caso ha conmocionado a Australia durante varias semanas, con un hombre que tuvo que ser hospitalizado tras ingerir una fruta con una aguja insertada, más de un centenar de denuncias en todo el país y una epidemia de noticias falsas.
Ut Trinh ha comparecido este lunes en un tribunal de Brisbane, una ciudad de unos 2,3 millones de habitantes del Estado de Queensland situada en el este de Australia. La acusada, a quien se le ha denegado la libertad condicional al menos hasta la próxima vista —prevista para finales de noviembre—, está imputada por siete cargos, entre los que está la "contaminación de productos, con circunstancia de agravamiento", según ha informado este lunes en rueda de prensa Jon Wacker, jefe de la división de Narcóticos y Crímenes Graves de la Policía de Queensland.
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My Ut Trinh y una fresa atravesadapor una aguja. |
Wacker ha dicho que estas últimas semanas se han denunciado en Australia 320 casos de sabotaje de fresas que afectaron a 68 marcas, 49 de ellas del Estado de Queensland. "En estos asuntos, en los que el principal contaminante fueron las agujas de coser, hemos visto 186 incidentes en todo el país. De estos, 77 fueron en Queensland y 15 parecieron ser bromas o quejas falsas", ha explicado.