Eduardo Ibarra Aguirre /8-I-18
Por primera ocasión en la historia de EU como nación independiente respecto de cualquier potencia extranjera, pero no de su propia plutocracia, un presidente tiene que negar que es mentalmente inestable y declarar: “De hecho, a lo largo de mi vida mis dos ventajas mayores han sido mi estabilidad mental y ser como que muy inteligente… Fui de ser un empresario muy exitoso a una de las estrellas de televisión más altas, a presidente de Estados Unidos (en mi primer intento). Creo que eso calificaría no como inteligente, sino como genio… ¡y un genio muy estable además!”
Lo dijo Donald John Trump a 14 días de cumplir un año despachando en la Casa Blanca, durante una conferencia de prensa, rodeado de sus más fieles legisladores republicanos e integrantes de su gabinete, con motivo de la publicación (adelantada por las amenazas de Donaldo Juan) del libro Fire and fury, de Michael Wolff, que está en el centro del debate político y en el que son citados asesores y amigos del presidente y señala que no es apto para el puesto.