viernes, 14 de diciembre de 2018

diciembre 14, 2018
Pedro Echeverría V.

1. No tuve atención al discurso del presidente López Obrador; me pareció escuchar que “no le gustaban las manifestaciones violentas”; sin embargo él debe saber que la violencia nació junto a la propiedad privada, cuando unos pocos comenzaron a apropiarse de las tierras y otras cosas de todos. Luego que una minoría se hizo poderosa organizó ejércitos, policías, tribunales y cárceles para someter al pueblo que era mil veces más numeroso.

2. Mi experiencia desde los 19 años de edad es que el pueblo sufre hambre, miseria, explotación y malos tratos. Hace decenas de peticiones por escrito, nombra comisiones, y, sólo cuando se ha cansado de pedir, organiza protestas en la calle. En las manifestaciones antigubernamentales en las calles –aunque muy molestos- ningún manifestante sale armado, sólo usa sus gritos, sus brazos para manotear y sus pies para caminar y correr.

3. La policía y el ejército aparece en las calles con sus caballos, sus perros, forrados en cuerpo, con máscaras antigases y una pinche disciplina militar para intimidar, para atemorizar, para bloquear y para lanzar gases lacrimógenos. ¿Qué hacer ante tan criminal y violenta acometida contra los pacíficos manifestantes? ¿Correr a escondernos en la casa para evitar que nos acribillen o por lo menos nos detengan para encarcelar?

4. En México –está más que probado- que los problemas se solucionan a favor de quienes poseen más fuerza. ¿Cómo explicar que mil poderosos multimillonarios, por lo menos desde hace 100 años, dominen a más de 125 millones de mexicanos, sino es por la fuerza del Estado? ¿Por qué todos los gobiernos de México –por lo menos desde Carranza en 1917- han estado al servicio de los dueños del dinero? Por la fuerza y no otra cosa.

5. López Obrador está probando su fuerza. Ganó una batalla, la electoral, pero están pendientes muchas más que pueden tornarse violentas sino quiere dejar todo a medias que lo llevarán al inicio. ¿Será que la gran burguesía, los poderosos multimillonarios, perderán su dominio de manera pacífica, como se ilusiona López Obrador? ¿Hasta dónde dejarán llegar al “nuevo régimen” para demostrar una vez más quién manda en México?

6. Entonces, López Obrador, la violencia es tan antigua como la propiedad privada. Los jóvenes españoles irrumpieron hace seis años en las calles, así como los franceses en las calles han puesto a temblar a la burguesía francesa. Mientras exista la gran división de clases y la terrible desigualdad social, las luchas en las calles será la expresión de los trabajadores, estudiantes y aliados. La violencia viene inevitablemente de las minorías que se resisten a perder privilegios. (14/XII/18)

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