martes, 3 de julio de 2018

julio 03, 2018
MOSCÚ / SAN PETERSBURGO, Rusia, 3 de julio de 2018.- Suecia le ganó 1 a 0 a Suiza y avanzó a los cuartos de final de Rusia 2018. El gol lo hizo Emil Forsberg con un tiro desde afuera del área que se desvío en el defensor Manuel Akanki cuando intentó rechazar la pelota. Sobre el final del partido volvió a aparecer el VAR para darle suspenso a las acciones. Una escapada al gol de Martin Olsson, que había reemplazado a Forsberg, motivó una infracción del suizo Michael Lang que fue expulsado. Pero la asistencia del video le indicó al árbitro quel a falta había sido afuera del área.

Suecia, que había ganado su pasaje a octavos luego de ganarle a México 3 a 0, se enfrentará ahora al ganador de Colombia e Inglaterra que juegan a partir de las 15 (hora argentina) en el Spartak Stadium. Los suizos dejan el Mundial luego de haber accedido a octavos de final en cuatro oportunidades en los últimos cinco campeonatos. El equipo de Vladimir Petkovic llegó a Rusia con una buena hoja de calificaciones: una derrota en los últimos 25 partidos. Esta es la segunda y la más dolorosa. Pero no queda en discusión el mérito de Suecia para avanzar a cuartos de final y volver a jugar el sábado en la ciudad de Samara.

A los 67 minutos, el jugador Emil Forsberg anotó el único gol del partido de Suecia vs Suiza por los octavos de final del Mundial Rusia 2018. Con un derechazo, el balón chocó con el rival y entró a las redes suizas. (AFP)

El partido tuvo muchos minutos dominados por la cautela y el temor de los equipos a quedar desarmados. A que suceda lo que le pasó al final a Suiza cuando lanzada a empatar el partido quedó con sus líneas muy divididas y expuesta al contraataque. Suiza y Suecia abandonaron pocasveces el planteo prolijo con el que llegaron al partido. Los suizos sin una referencia definida en el área y tomándolo como un espacio vacío para el que llegara. La mayoría de las veces ese jugador fue Blerim Dzemaili y para pescar algún pase de Xherdan Shaqiri. Como siempre el veloz mediocampista cerró todo para él el sector derecho de Suiza y procuró engañar con sus idas y vueltas y sus enganches. Suecia casi nunca desarmó su 4-4-2 y por lo tanto cada movimiento de Shaqiri significó sacarse de encima la marca repartida entre Ludwig Augustinsson y Albin Ekdal, sin demasiado éxito.

Suecia defendió y atacó en bloque. Se estacionó más en el área y tuvo sus oportunidades con disparos de el delantero Marcus Berg, el mediocampista Emil Forsberg y hasta las subidas del defensor Mikael Lustig, pero todos sin destino. De todas formas Suecia se mostró siempre como un equipo más ambicioso. Las llegadas de Forsberg fueron el mejor camino para un equipo que se mueve bien en bloque. Camino al final del partido hubo algunas atajadas de Robin Olsen que dieron seguridad cuando ya Suiza atacaba con pocas ideas y los centros que surgían de los amagues de Shaqiri.

Se va otro Mundial en el que los elogios hacia el hábil jugador suizo no impactan con su rendimiento dentro del campo de juego. Es un campeonato donde las estructuras triunfan sobre las acciones individuales de los jugadores. Una Suecia concentrada, enérgica y apegada a un sistema tuvo más argumentos que el movedizo Shaqiri. (Marcelo Gantman / La Nación)

0 comentarios:

Publicar un comentario