jueves, 5 de julio de 2018

julio 05, 2018
MÉRIDA, Yucatán, 5 de julio de 2018.- Los sonidos de la naturaleza, los provenientes del viejo mundo de índole religioso y pagano, al igual que los temas que se oían en salones o espacios públicos del siglo XIX, dan la bienvenida a las y los paseantes en el primer pabellón del Palacio de la Música.

Al llegar al museo del edificio, uno de los referentes culturales más importantes de México, el vestíbulo se convierte en una sinfonía de ecos con los cantos más representativos de las diversas religiones del planeta, en un audiovisual de 14 minutos que se encuentra previo a la sección Antecedentes.

Al voltear la mirada, una pantalla interactiva en forma de guitarra contiene la guía del sitio y enseguida, el yucateco más universal, Armando Manzanero, da la bienvenida a través de una proyección.

El Pabellón de Antecedentes del Palacio de Música va de lo prehispánico a principios del siglo XX.


El primer segmento contiene una imagen como alegoría del mural maya de Bonampak “Muro pintado”, que se encuentra en Chiapas, cuyo valor recae en el registro de la música prehispánica y el rol que ésta jugó en las diferentes civilizaciones que conforman nuestro país.

Al avanzar, el público se deleita con melodías sacras, profanas y de 1800 en una mampara interactiva en forma de órgano tubular, que incluye salmos, réquiem, Te déum, magnificat, entre otras.




Quienes visiten la sede se transportarán a los sitios donde se elaboraban las composiciones religiosas y prohibidas de esa época, mediante la escenografía de corte eclesiástico que se complementa con estaciones de escucha y campanas de sonido; asimismo, se exhiben piezas e instrumentos del siglo XIX, corridos, coplas y jarabes del mismo periodo.

Las tertulias que se daban en la etapa de la Independencia, además de la influencia de géneros de Europa, como ópera, vals y chotis durante el Porfiriato que se adoptaron y transformaron, están ejemplificados en este espacio ambientado en una casona y el lunetario de un teatro.




En este apartado se disfrutará una grabación de 1909, considerada como la primera que se  registró en México y cuyo contenido fue la respuesta que Porfirio Díaz hizo en agradecimiento a Thomas Alva Edison, al recibir unos fonógrafos que actualmente resguardan la Fonoteca Nacional.

Las y los interesados en visitar este recinto, pueden hacerlo de martes a sábado en los recorridos que se llevarán a cabo a las 10:00, 11:30 y 14:00 horas. Para más información, está a disposición el portal www.culturayucatan.com

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