LIMA, Perú, 15 de julio de 2017.- El ex presidente de la República Ollanta Humala envió un mensaje la noche del viernes, a través de su cuenta de Twitter, tras ser recluido en el penal de la Diroes (Ate Vitarte).
“Agradecemos las muestras de cariño recibidas de nuestros militantes, amigos y la población. Sé que están cerca desde ayer. Un fuerte abrazo”, fue la publicación que se leyó desde la cuenta oficial del ex mandatario.
Minutos antes, la miembro del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Nacionalista Cynthia Montes refirió que había conversado con los abogados de Ollanta Humala, y que este “solicitó enviar un mensaje por su Twitter a nuestros militantes”.
Una junta clasificadora del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) determinó que el ex jefe del Estado afronte los 18 meses de prisión preventiva que le impuso el juez Richard Concepción Carhuancho en el penal de la Diroes (Ate Vitarte).
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| El expresidente Ollanta Humala, rumbo al penal Virgen de Fátima. (Ernesto Arias / EFE) |
Minutos después de las 2:00 p.m., y en medio de un despliegue de al menos cien agentes policiales, Ollanta Humala y Nadine Heredia salieron juntos de la carceleta del INPE, ubicada en el Palacio de Justicia, para dirigirse a sus respectivos centros penitenciarios.
El vehículo del INPE, no obstante, no los condujo a los penales sino al complejo policial Los Cibeles, en el distrito limeño del Rímac. Ahí, el ex mandatario y la ex primera dama abordaron cada uno un helicóptero que los condujo a sus destinos en cuestión de minutos.
En el caso de Ollanta Humala, el helicóptero lo condujo al penal de la Diroes, donde también está recluido el ex presidente Alberto Fujimori, condenado por delitos de corrupción y homicidio calificado.
Nadine Heredia, por su lado, se dirigió en helicóptero hasta la escuela de oficiales de la Policía Nacional, en Chorrillos. Desde ahí, abordó otro vehículo del INPE que la trasladó hasta el penal Virgen de Fátima, a donde llegó a las 3:12 p.m. Como su esposo, ahí podría pasar los próximos 18 meses, a menos que los recursos presentados por sus abogados ante la Sala Penal de Apelaciones Nacional prosperen y revoquen la medida.
Además de su detención, la prisión preventiva ha significado la suspensión de los privilegios que correspondían a Humala en su calidad de expresidente. Aunque mantendrá su sueldo (solo puede dejar de percibirlo si hay una sentencia firme en su contra), desde su detención ha perdido su equipo de asesores y el vehículo oficial que le correspondía. Podrá tenerlos de vuelta cuando recupere su libertad.
Las reacciones ante semejante acontecimiento no se han hecho esperar. Consultado por la prensa, el presidente Pedro Pablo Kuczynski calificó al falló de «histórico», aunque matizó: «Al final es muy triste lo que está pasando. Y yo espero que el proceso del señor Humala y su esposa transcurra rápidamente y de manera transparente».
Keiko Fujimori, quien compitió y perdió con Humala en las elecciones de 2011, difundió su opinión en su cuenta de Twitter: «Ayer, el sistema judicial ha dado muestras de independencia. Sin embargo, la situación es triste porque afecta también a menores inocentes. Confiamos en que la justicia siga en la búsqueda de la verdad que todos merecemos conocer». Paradojas de la vida, el rival político que le arrebató la posibilidad de ser presidenta, ahora está preso junto a su padre.
El expresidente Alan García también empleó las redes sociales para pronunciarse: «Aunque usaron su poder para destruirme en vez de promover el crecimiento, lamento —por la patria y por sus hijos— el espectáculo de ayer». García, Humala y Toledo se encuentran bajo el escrutinio del Poder Judicial desde que, en su acuerdo con la justicia de los Estados Unidos, el empresario Marcelo Odebrecht aseguró que su constructora había pagado 29 millones de dólares en sobornos a funcionarios de los gobiernos peruanos entre 2005 y 2014, años que se corresponden con los periodos de estos tres presidentes. (El Comercio / El País)
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