jueves, 6 de abril de 2017

abril 06, 2017
Judith Amador Tello / La magia y el mito de Leonora Carrington

CIUDAD DE MÉXICO, 6 de abril de 2017.- Hoy se cumplen cien años del nacimiento de la pintora surrealista Leonora Carrington en Clayton-le-Woods, Reino Unido.

Max Ernst la llamaba “La novia del viento”. La crítica de arte Raquel Tibol la calificó de “Excéntrica del surrealismo”. La pintora y escultora de origen británico que se arraigó en México a principios de los cuarenta será recordada a lo largo de este año con diversas actividades como parte de un homenaje por el centenario de su nacimiento.

Aunque reacia a las entrevistas, mucho se ha escrito sobre ella. La escritora Elena Poniatowska publicó en 2011, en Seix Barral, "Leonora", una biografía novelada que inicia contando la infancia de la artista en su tierra natal. Una escena mientras hace la tarea y habla con su nana dice:

Mural "El mundo mágico de los mayas" (1963), en el Museo Nacional de Antropología.

“Los sidhes incluso son mejores amigos que Gerard (uno de sus hermanos y compañero de juegos): los dos han devorado a Jonathan Swift, pero Gerard ya no quiere jugar a los liliputienses ni a pedir audiencia al emperador Blefescu. A Leonora, la gente pequeña que sale de la tierra la aconseja, a Gerard ya no, ni se identifica con Alicia de Lewis Carroll ni con Beatrix Potter que lleva a Peter Rabbit, su conejo bajo el brazo. Ésas son cosas de niña. Los shidhes son más sabios que cualquier cosa en el mundo, más sabios que el pez grande en el estanque, y eso ya es mucho decir porque el pez lo sabe todo. La niña se detiene en la orilla y él le dice que todo va a arreglarse, y los reflejos de plata de su lomo la iluminan. Claro, con la ayuda de Nanny.”

El mundo fantástico ya jamás la abandonó. El escritor Rafael Vargas consignó en el semanario Proceso, al reseñar la exposición "La danza de los espectros", en agosto de 2014, que la investigadora japonesa Masayo Nonaka relató en el libro "Remedios Varo. Los años en México" que, si bien Carrington conoció los mitos y creencias sobrenaturales de nuestro país, “siguió cultivando los mitos celtas y sajones que abrazó desde niña”. Y cita a la pintora surrealista:

Leonora Carrington (sentada, a la derecha) con Carlos Fuentes, Carlos Monsiváis, Elena Poniatowska y José Luis Cuevas en el homenaje a la pintora en el Museo "José Luis Cuevas" el 11 de febrero de 2012. (Notimex)

“Las tradiciones mexicanas de magia y brujería son fascinantes pero no son iguales a las mías… Pienso que cada país tiene una tradición mágica, pero nuestro acercamiento a lo desconocido es exclusivo de nuestra herencia. Es algo que tiene que ver con el nacimiento, tu sangre, carne y huesos.”

Carrington nació en Lancashire, Inglaterra, el 6 de abril de 1917. Su primer esposo fue Max Ernst, con quien participó en la Exposición Internacional de Surrealismo en París, en 1938. Durante la Segunda Guerra Mundial Ernst fue hecho prisionero en el campo de Les Milles, en Vichy, Francia. Ella fue recluida en un hospital psiquiátrico de Santander. Relata ese episodio en su libro autobiográfico "En bas".

Luego huye a Lisboa y conoce al escritor mexicano Renato Leduc en la embajada de México (ella mencionó en una entrevista que se casaron en la embajada británica, antes de embarcarse a Estados Unidos). Con él llega a nuestro país a principios de los cuarenta del siglo XX y se establece aquí y forma un grupo de amigos con Remedios Varo, su esposo Benjamin Péret y Wolfgang Paalen. Se divorcia de Leduc prácticamente al año siguiente de su matrimonio y se casa finalmente con el fotógrafo Emerico “Chiki” Weisz.

Se cuenta que fue durante su matrimonio con Ernst cuando entró en contacto con otros exponentes del surrealismo como André Breton, Pablo Picasso, Salvador Dalí y Marcel Duchamp.

Tardío aprecio en Inglaterra

En febrero de 1995, al hacer su crítica de la exposición "Leonora Carrington, una retrospectiva", en el Museo de Arte Moderno, Raquel Tibol mencionó algunas de las exhibiciones que había tenido en diferentes partes del mundo, por ejemplo en la galería Pierre Matisse de Nueva York, en 1948, en París, Tokio, Austin, así como en Londres, Norwich y Bristol, en su natal Inglaterra.

"Mexico City", óleo sobre tela, colección privada.

Pero no expuso en Londres de manera individual sino hasta 1990 (si bien sus obras se conocieron en colectivas en 1963, 1970, 1977 y 1989). Explica la crítica de arte en Proceso, en aquel momento:

“Para recuperarla, los ingleses tuvieron que observar no sin envidia la conmoción mundial que producían la pintura y la personalidad de Frida Kahlo desde fines de los años setenta.”

Tras destacar que, en contraste, los mejores escritos sobre la pintora son de la historiadora y crítica de arte inglesa Whitney Chadwick, Tibol agrega:

“El desinterés británico por esta mujer errante, que llegó a México en 1943, quedaba corroborado también por la ausencia de su nombre en el corregido ‘Dictionary of art and artist’, editado por Thames and Hudson en 1985, actualizando y corrigiendo una primera versión de 1966; ambas tuvieron como consulting editor al respetado crítico Herbert Read. En el ‘Dictionary’ sí figura una pintora y grabadora del mismo apellido: Dora Carrington (1893-1932), miembro del célebre Blomsbury Group, al que pertenecieron Virginia Wool, Lytton Strachey, Vanesa Bell, John Maynard Keynes y Roger Fry, entre otros.”

"Quería Ser Pájaro" (1960), óleo sobre tela, 119 x 90 cm. Galería Frey Norris, San Francisco.

Y añade:

“El encumbramiento internacional de Leonora Carrington en la última década ha redundado en la elevación de los precios de sus obras. En la temporada de subastas 1993-94 de la casa Sotheby’s, su óleo Le grand adieu (1958) se vendió en 244 mil 500 dólares.”

Destaca asimismo que el estudio de Chadwick permite desentrañar las imágenes “extremadamente imaginativas” de la pintora. Una “vastísima información cultural que le permite interpretar el universal cruce de mitologías que utiliza la pintora para crear su teatro de imágenes; el entendimiento de Carrington como una mujer rebelde que encontró su propia y muy subjetiva coherencia en la locura formativa, en el esoterismo, la alquimia, las prácticas espirituales, los sueños lúcidos, el humor, la especulación, la metafísica, la adivinación, la predicción, el escepticismo, la unión de los opuestos, la psicología junguiana, el budismo tibetano, el hermetismo, los metalenguajes, lo sobrenatural. Chadwick nos hace entender hasta qué punto el trabajo de Carrington es consecuencia de un rechazo militante de las verdades simples”.

La pintora realizó fundamentalmente obra de caballete. Pero hay que recordar que, inspirada en las leyendas y mitos de los tzotziles y tzeltales, con quienes convivió de manera directa, acompañada por la antropóloga y fotógrafa suiza Gertrude Blum, creó en 1963 el mural "El mundo mágico de los mayas", en el Museo Nacional de Antropología.

Igualmente, invitada por el artista inglés Edward James, autor de una serie de esculturas fantásticas al aire libre en Xilitla, San Luis Potosí, Carrington realizó entre 1964 y 1967 un mural sin nombre en la entrada de la casa del escultor en las inmediaciones de dicho pueblo de la región Huasteca.

Incursionó también en la escultura en los últimos lustros de su vida. En el año 2000 donó a la Ciudad de México la obra fundida en bronce Cómo hace el pequeño cocodrilo, ubicada en Paseo de la Reforma y Havre. Inspirada en un poema de Lewis Carrol, representa una barcarola con trompa de cocodrilo, en la cual navegan seis personajes y el remero, todos cocodrilos.

Un museo-casa

El mito acerca de la fobia a las entrevistas de la pintora creció a lo largo del tiempo. En el libro "México: Su apuesta por la cultura. El siglo XX, testimonios del presente" (Proceso/Grijalbo/UNAM, 2003) se publica una entrevista con Carrington, realizada por Susana Cato y Lorena Crenier, luego de superar el comentario de un “malintencionado colega periodista” que les advirtió que ni lo intentaran porque “cuando llueve no contesta el teléfono”. Cuentan en su texto:

“Lo más extraño de entrevistar a Leonora Carrington es que la dama mítica navega con bandera de ‘normal’ en una vieja casa de la colonia Roma. Y, por supuesto, ‘siempre contesto el teléfono’, nos dijo con pragmatismo elemental ‘pues tengo dos hijos y todo el tiempo quiero saber de ellos’.”

Les contó que escribió "En bas" por sugerencia de Breton, en 1943 y se arrepintió de haberlo hecho.

“–¿Por qué el título "En bas" (que significa "Debajo de")? ¿Tiene que ver con el surrealismo que yace bajo la realidad? –le preguntaron las autoras.

“–No, era cuando estaba ya un poco mejor, era el piso de abajo del hospital, donde mandaban a los que ya iban a salir; cuando te decían: ‘Ya te puedes ir en bas’. Era una buena señal.”

Como autora cuenta con una producción que abarca lo mismo cuento, que teatro y novela.

Nacionalizada mexicana, Carrington vivió más de sesenta años en México, siempre en la zona de las colonias Roma y Condesa, por donde se le podía encontrar caminando por la avenida Álvaro Obregón, el Parque México, y otras calles de la zona, relata el director y guionista Gibrán Bazán, en su documental Territorio Leonora, producido por Marsash Cinema y disponible en Youtube.

En él relata ese universo esotérico que nutrió su obra, y habla del reducido número de personajes que solían visitar su casa como el escritor Aldous Huxley, autor de "Un mundo feliz", o la actriz de la película "Lo que el viento se llevó", Vivien Leigh. La visitaban igual Remedios Varo, Octavio Paz y su esposa Mari Jo, Elena Poniatowska y Carlos Monsiváis.

La última surrealista falleció el 25 de mayo de 2011, a los 94 años, a consecuencia de una neumonía. En febrero de 2016 sus hijos Gabriel y Patricia Weisz crearon la Fundación Leonora Carrington (www.fundacionleonoracarrinton.org), con el propósito de promover y difundir las artes, apoyar actividades de educación e investigación artística, y acercar a los interesados al universo de la pintora.

Las actividades del Centenario comenzaron ayer en el Museo de Sitio del Centro de las Artes, en San Luis Potosí, con la exposición "Un paseo por los sueños de la novia del viento", que reúne obra gráfica. El jueves 6 se abrirá en la Biblioteca de México en esta ciudad la muestra "100 años de un artista: Leonora Carrington". El programa conmemorativo fue dado a conocer por la agencia Apro el pasado 30 de marzo.

Hay que agregar que la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) ha informado a los medios que está en pláticas con Pablo Weisz Carrington para adquirir la casa que la pintora habitó en la calle de Chihuahua, en la colonia Roma, con el fin de convertirla en la Casa Museo Leonora Carrington. La UAM también abrirá una exposición titulada "Leonora Carrington en su centenario. Imaginación delirante", este jueves 6, a las 19:00 horas en la Galería Metropolitana, ubicada en Medellín 28, colonia Roma. (apro)