domingo, 9 de abril de 2017

abril 09, 2017
WASHINGTON D.C., 9 de abril de 2017.- La salida de presidente de Siria, Bashar al Assad, es "inevitable", afirmó hoy la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Nikki Haley, en declaraciones al programa "Estado de la Unión" de la cadena CNN, en un cambio de postura del gobierno de Donald Trump.

Antes del ataque con armas químicas del martes a la ciudad rebelde de Jan Sheijun, que causó la muerte de al menos 80 personas, Haley había declarado que derrocar a Al Assad no era “una prioridad”.

Antes de su elección como presidente, Donald Trump había descrito la lucha contra el autodenominado Estado Islámico (EI, IS o ISIS) y la búsqueda de la expulsión de Al Assad, al mismo tiempo, como "una idiotez".

Bashar al Assad, presidente de Siria. (Archivo Reuters)

Pero después de ver las imágenes de las terribles consecuencias del ataque químico, Trump ordenó el bombardeo de la base aérea de Shayrat en el oeste de Siria, que Estados Unidos cree que fue la plataforma de lanzamiento de la agresión del pasado 4 de abril.

Esta es la primera vez que Estados Unidos golpea al régimen sirio desde el comienzo de la guerra civil en el país árabe que ya lleva seis años.

Haley dijo que "eliminar a Al Assad no es la única prioridad, así que lo que estamos tratando de hacer es obviamente derrotar al EI. En segundo lugar, no vemos una Siria pacífica con Al Assad allí, en tercer lugar, sacar la influencia iraní y finalmente moverla hacia una solución política”.

“Al final del día se trata de una situación complicada, no hay respuestas fáciles y una solución política va a tener que pasar", dijo la embajadora estadunidense en la entrevista.

Haley indicó que la opinión del gobierno de Trump es que una solución política no sucederá con Al Assad en el poder, aunque se contuvo de decir que la salida del presidente sirio es ahora la política oficial de Estados Unidos.

"Si se ven sus acciones, si se ve la situación, va a ser difícil ver un gobierno que sea pacífico y estable con Al Assad", aseveró.

"El cambio de régimen es algo que pensamos que va a pasar porque todas las partes van a ver que Al Assad no es el líder que debe estar trabajando para Siria", puntualizó.

El secretario de Estado, Rex Tillerson, fue más esquivo este domingo sobre el futuro de Al Assad al declarar a Face the Nation, de CBS, que el Estado Islámico primero tendría que ser reducido, entonces se podría dirigir "nuestra atención directamente a la estabilización de la situación en Siria".

Reacciones ante armas químicas

Rusia ha afirmado que las muertes del martes pasado en la ciudad de Jan Sheijun fueron causadas por un ataque aéreo del régimen sirio en una instalación de armas químicas controlada por los rebeldes.

Siria, en tanto, ha dado una oscura historia de lo ocurrido, pero niega deliberadamente haber llevado a cabo un ataque químico y culpó a "grupos terroristas" por las muertes.

El vierrnes pasado, Haley advirtió que Estados Unidos estaba preparado para emprender nuevas acciones en Siria, pero el gobierno de Trump ha negado a revelar los próximos pasos.

La tensión entre Rusia y Estados Unidos ha aumentado considerablemente desde que Trump ordenó los ataques con misiles. Rusia envió una fragata armada con misiles a un puerto en el oeste de Siria en una aparente demostración de fuerza en respuesta a la acción estadunidense.

La fragata rusa que está armada con misiles de crucero (diseñados para poder llevar cargas con explosivos convencionales o cabezas nucleares a cientos de kilómetros con elevado porcentaje de puntería) habría entrado al Mediterráneo en el camino hacia un sitio de logística en Siria, dijeron medios estatales rusos.

Rusia es el aliado más poderoso de Siria y ha apoyado el régimen de Al Assad con poder aéreo.

Estados Unidos ha dicho que el Pentágono está buscando cualquier evidencia que demuestre que el gobierno ruso conoció o que fue cómplice en el ataque químico.

Un funcionario militar estadunidense dijo a CNN que el Pentágono estaba examinando específicamente si un avión de guerra ruso había bombardeado un hospital en Jan Sheijun cinco horas después del ataque químico inicial, con el objetivo de destruir pruebas. Rusia ha negado rotundamente las acusaciones.

Funcionarios estadunidenses dijeron que el ataque del viernes pasado contra la base aérea de Shayrat impactó en aviones, almacenamiento de combustible, vertederos de armas y otros equipos, y tenía como objetivo enviar un mensaje al régimen sirio de que no se tolerará más el uso de armas químicas.

Pero nuevos ataques aéreos realizado el sábado, que se cree fueron realizados por el régimen sirio o Rusia, nuevamente sobre Jan Sheijun, plantea críticas de que la acción estadunidense fue ineficaz y debió haber tenido como objetivo destruir la pista de aterrizaje. (NTX)