domingo, 30 de abril de 2017

abril 30, 2017
BUENOS AIRES, Argentina, 30 de abril de 2017.- Las Madres de Plaza de Mayo, símbolo de lucha y resistencia en la última dictadura en Argentina en la década de 1970, conmemoraron este domingo sus 40 años de existencia con música y marchas. Allí reivindicaron "los ideales" de sus hijos desaparecidos por el régimen militar de dicho periodo.

"Alerta, alerta que están vivos, todos los ideales de los desaparecidos", cantaban al unísono miles de personas que marcharon tras las madres con sus emblemáticos pañuelos blancos alrededor de una pirámide, en el centro de la plaza que les dio el nombre.

Al frente estaba la líder Hebe de Bonafini, de 88 años, junto a otras tres Madres, todas en silla de ruedas empujadas por activistas. Detrás, una decena de mujeres ancianas avanzaba dando pequeños pasos, sosteniendo una gran bandera con la inscripción "La falta de trabajo es un crimen".

(AFP)

La marcha fue vestida con varios carteles con descripiones como: "30.000 razones para seguir luchando", se leía en un cartel aludiendo a los desaparecidos. A su vez, el teólogo y filósofo Rubén Dri, de 88 años, dijo a AFP que "las Madres simbolizan la vida, frente al proyecto de muerte de la dictadura militar".

Dri, que se exilió durante la dictadura, se lamentó de que con el gobierno de Mauricio Macri "volvió el neoliberalismo. Y nuevamente son las Madres que encabezan la lucha por la recuperación de la vida y la dignidad".

30 de abril de 1977

Ante la falta de respuestas 14 mujeres se reunieron en la plaza frente a la Casa Rosada, sede del gobierno, para reclamar por sus hijos arrancados en medio de la noche de sus hogares o secuestrados en la calle.

Estas mujeres, más tarde convertidas en las Madres de Plaza de Mayo, se pararon allí para mostrar las fotografías de sus hijos.

(AFP)

La policía les ordenó: "circulen, circulen". En lugar de irse, comenzaron a caminar. Así nació la mítica 'ronda' de los jueves que desde entonces se repite cada semana en la plaza que fue testigo tanto de sus combates como de sus divisiones.

"A 40 años, encontrarme aquí es una sensación hermosa, completamente distinta de aquel 30 de abril de 1977, cuando estas 14 mujeres estábamos ahí, pensando que íbamos a hacer una forma de presión para que (el exdictador Jorge) Videla, ese genocida, nos diera alguna información por la ausencia de nuestros hijos", evocó Mirta Acuña de Baravalle, (92) de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora.

Deudas de democracia

"Los gobiernos tienen una deuda muy grande: es que se abran los archivos y nos digan qué pasó con todos los desaparecidos, que los jueces digan a quién entregaron los bebés que fueron apropiados de sus madres cautivas embarazadas. Hay más de 400 jóvenes que no conocen su identidad", advirtió la dirigente Nora Cortiñas, de 87 años.

Desde 1977, 122 niños robados recuperaron su identidad, el último caso, la semana pasada.

A partir del 2003, con la anulación de las leyes de amnistía, se sumaron decenas de juicios por crímenes de lesa humanidad en todo el país, con unos 700 condenados, la mayoría militares y policías y aún hay numerosos procesos en curso. (El Observador)