lunes, 20 de febrero de 2017

febrero 20, 2017
Pedro Echeverría V.*

Van 10 nombres de políticos yucatecos que han sido conocidos como gobernadores, aunque los dos últimos sólo se han acercado mucho. Por convicción nunca he votado por ninguno de ellos ni por otros porque los cargos de gobernador, legislador o presidente de la República jamás han servido para resolver los problemas de hambre, miseria, pobreza, desempleo del 80 por ciento del pueblo y, porque al mismo tiempo todos los gobernantes son instalados en sus cargos para servir a los empresarios. ¿Qué caso tiene votar por candidatos impuestos por los partidos, por los medios de información y por los miles de millones de pesos que se reparten entre el electorado en forma de regalos, despensas, cheques comprando votos? Bien aquí les presento a 10 personajes muy habilidosos que lograron escalar jerarquías dentro de la sociedad capitalista.

1. Olegario Molina. Fue un gran hacendado, negociador del henequén, gobernador de Yucatán y el más importante porfirista yucateco. Durante el Porfiriato en México (1876-1911) los hacendados henequeneros fueron los amos de Yucatán. Fueron unas 1,200 haciendas las que se registraron, ubicándose en un radio de 80 kilómetros de la ciudad de Mérida. Los más ricos poseían más o menos 20 haciendas, otros ocho, cinco o tres; los trabajadores tuvieron la calidad de esclavos miserables “acasillados” dado que no podían salir de las haciendas por estar endeudados de por vida en la “tienda de raya”. Molina el porfirista, a fines del XIX, era liberal frente a los hacendados conservadores encabezados por Francisco Cantón. Gobernó de 1902 a 1906, año que renunció para irse de ministro de Fomento, Industria y Comercio del gobierno de Porfirio Díaz. La revolución mexicana (1910-17) le dio golpe mortal al sistema de haciendas henequeneras, pero aún subsistió ese sistema hasta 1937 que el presidente Cárdenas (1934-40) les expropió un 75 por ciento de sus tierras para convertirlas en ejidos colectivos.

2. José María Pino Suárez. Nació en el estado de Tabasco y fue destacado intelectual que editaba el periódico El Peninsular. Acompañó a Madero en su gira presidencial por el estado de Yucatán, fue opositor al porfirismo; en 1909 fue gobernador de Yucatán. Al triunfar la Revolución ocupó la Vicepresidencia de México, además del cargo de Justicia y Bellas Artes. Siguió a Madero hasta que juntos fueron fusilados por el golpe de Estado huertista en 1913. En Yucatán compitió por la gubernatura en el antirrelecionismo maderista; los otros candidatos fueron el conservador Delio Moreno Cantón y el candidato oficial fue Enrique Muñoz Arístegui quedándose éste mediante un fraude electoral.[] Cuando Madero se liberó de la prisión y asumió la presidencia provisional conforme al Plan de San Luis, nombró a Pino Suárez gobernador de Yucatán, desempeñándose como tal de junio a agosto de 1911. Se realizaron las elecciones y Pino Suárez derrotó a Moreno Cantón y asumió en octubre.

3. Salvador Alvarado. Revolucionario sinaloense enviado por Carranza a Yucatán en 1915 para hacerse cargo del gobierno en momentos en que Yucatán se agitaba por un movimiento “autonomista”. Con Alvarado se introdujo con armas y ejército la Revolución mexicana para realizar las reformas necesarias contra la dominación de los hacendados y la “casta divina”. Fue gobernador de 1915 a 1917 porque la Constitución se lo impidió; pero, por cumplir con demandas revolucionarias, fue el menos nefasto en la historia de los gobernadores de Yucatán. Fue el fundador de la Casa del Obrero Mundial en Yucatán y del Partido Socialista de Yucatán; se le atribuye ley agraria, ley del trabajo, la escuela rural, liberación del indio, ley de indemnización, de liberación del servidor doméstico, del estado seco, sobre mercado del henequén y adquisición de acciones del FFCC. Al mismo tiempo le dio bienvenida a Felipe Carrillo Puerto que se encontraba muy cerca del zapatismo de Morelos.

4. Felipe Carrillo Puerto. Se convirtió en “gloria” de Yucatán al ser gobernador, fundador del Partido Socialista del Sureste y ser asesinado por el levantamiento Delahuertista en 1924. A Carrillo se le festeja en grande desde 1925, cada año, por los gobiernos del PRI como representante de un “gobierno socialista” que nunca existió. Carrillo gobernó de 1922 a 1924, durante el gobierno obregonista que fue la etapa más alta de la revolución mexicana en muchos estados del país donde hubo otros líderes radicalizados. Para manipular se habló de un “socialismo yucateco” por haberse realizado dos congresos socialistas que no fueron otra cosa que congresos campesinos organizados desde el gobierno, es decir, de arriba/abajo. Además nunca se compaginó con la Tercera Internacional porque Carrillo era campesinista y no amigo de la clase obrera al reprimir a ferrocarrileros y a obreros progreseños.

5. Bartolomé García Correa. Fue diputado local importante en la confrontación de los herederos de Carrillo que hicieron nombrar gobernador sustituto a Iturralde Traconis, unos, y a Miguel Cantón, otros; fue fundador en 1929 junto al Jefe Máximo Elías Calles del PNR (abuelo del PRI); gobernador (1930-34) y luego senador. Ordenó realizar los “congresos socialistas” Tercero en 1930, Cuarto en 1931 y Quinto en 1932. En 1931 fundó el Diario del Sureste, de carácter oficial gobiernista y al mismo tiempo clausuró por dos años el Diario de Yucatán que era la oposición conservadora, de derecha. Ese periodo de gobierno correspondió al “Maximato callista” (1928-35) cuya característica principal fue dictatorial. García fue el gobernador que reprimió a los cordeleros en 1933 y contaba con guardias rurales. Lombardo Toledano (socialdemócrata) escribió en 1934: “El gobierno socialista de Yucatán y la Liga de Resistencia impone su voluntad a los directores de las Ligas y estos los imponen a la masa con disciplina férrea e inapelable”.

6. José González Beytia. Fue hecho gobernador por Ávila Camacho en 1946; gobernó con el presidente Alemán Valdez; así como Lázaro Cárdenas fue el primer presidente de la República de seis años, González Beytia fue el primer gobernador de seis años. Renunció en 1951 al saber que el presidente Alemán haría candidato y gobernador de Yucatán a su amigo Tomás Marentes. Con su renuncia provocó muchas protestas estudiantiles y de grupos políticos tradicionales contra Marentes; en las protestas estaban Betancourt Pérez, Pasos Peniche, Patrón Cervera, Peniche Vallado, el ”gordo” Góngora, así como Juan Duch, Manzanilla Schaffer y Melchor Zozaya; además los estudiantes Pedro Loría, Davy López, Jesús Viana. El gobierno de Marentes sólo fue de un año y cuatro meses. El gobierno de González Beytia parece que fue beneficiado con la II Guerra pues ésta vino a salvar a la industria henequenera de un desastre definitivo al venderse a EEUU un millón 250 mil pacas que benefició con creces a los capitalistas yucatecos. El gobernador tuvo que resistir las denuncias de fraude en “Henequeneros” de su antecesor Ernesto Novelo Torres (1942-46)

7. Víctor Cervera Pacheco Pienso que, por mucho, fue el político más hábil de Yucatán de todos los tiempos por la manera de moverse dentro de la estructura política y los métodos usados para arrastrar tras él a cientos de sus amigos que lo impulsaron. No tuvo principios ideológicos de izquierda o de derecha; jamás dejó del PRI y su centrismo. Ocupó diputaciones locales, federales y senadurías en varias ocasiones y otros cargos más, con excepción de la Presidencia de la República. Lo más notable fueron sus dos gubernaturas de Yucatán (1984/88 y 1995/2001), su dirigencia nacional de la CNC y su Secretaria de la Reforma Agraria. Lo conocí en 1957 en la Preparatoria como líder estudiantil un año antes que asumiera la presidencia de la Federación Estudiantil Yucateca (FEY). Yo estuve en la APEY (Asociación de periodistas estudiantiles de la FEY en 1957/58). Después de muerto Cervera sigue su dominio político en la gubernatura del estado. Fue corrupto, impulsivo, pero extremadamente hábil.

8. Dulce María Sauri Riancho. Aparece en política bajo el influjo de Carlos Salinas. Como oradora ocupa cargos políticos hasta llegar en 1991 a la gubernatura en sustitución de Manzanilla Schaffer. Mantuvo un gobierno fuerte y contestatario porque fue muy combatida por el conservador Diario de Yucatán propiedad de una rama familiar de los Menéndez impulsor del PAN; pero contribuyó a fundar el periódico Por Esto! de otra rama familiar Menéndez, defensor del PRI. Sauri participó en algunas polémicas en el congreso; no sólo fue gobernadora sino además presidenta nacional del PRI en el periodo en que fue derrotado el candidato presidencial Labastida por el panista Fox. El activismo de su marido, así como el pasado como guerrillero izquierdista de éste, ha sido aprovechado por el conservadurismo yucateco para buscar desprestigiar a la Sauri. Renunció a la gubernatura semanas antes de concluir su periodo para protestar contra las “concertasesiones” entre PRI y PAN. Se retiró al ceder el PRI.

9. Emilio Gamboa Patrón. Se inició en política de alto nivel como secretario particular o muy privado del Presidente de la Madrid (1982-88) Quizá nunca ha querido ser gobernador de Yucatán porque siempre ha tenido a sus pies cargos de secretario de Estado otorgados por los siguientes presidentes por ser muy fiel servidor; por tanto lleva 35 años brincando desde los altísimos cargos. Ni dice discursos, no imparte conferencias, pero –a pesar de cientos de denuncias y acusaciones graves que carga- se mueve a diario en los más altos niveles de políticos y empresariales. Pienso que su fuerza por ese trabajo de andar entre telones, entre tinieblas y lo oscurito, es tan grande como la de los presidentes que lo llaman para aconsejarles estrategias políticas. Me recuerda los “destapes” presidenciales en un libro de Castañeda: “La herencia”, así como a los miles de grandes consejeros y espías políticos en la historia (los Rasputín, Fouché o Kissinger)

10. Jorge Carlos Ramírez Marín Lleva alrededor de tres décadas ocupando cargos en Yucatán y luego en México. A pesar de que ha buscado destacar desde los ochenta en los gobiernos de Cervera, que se le ha tratado de identificar con los seguidores del “gamboísmo”, ha conservado cierta independencia. Ha estado tan activo los dos últimos años que parece poseer el “Don de la ubicuidad” porque se le ve en la ciudad de México, como vocero del PRI haciendo multitud de declaraciones y al otro rato en la ciudad de Mérida haciendo campaña para gobernador; ¿o para presidente de la República? Sin embargo dada la velocidad con que se mueve en México Gamboa Patrón es posible que su hijo se quede con el pastel o, que el encargado de Educación en el estado –apoyado por el gobernador- la obtenga para él. Total a Ramírez Marín lo podrán colocar en un alto cargo en el PRI o el futuro gabinete. Ramírez Marín no deja de ser un político burgués habilidoso. (20/II/17)

* He escrito varios libros sobre este asunto: La política en Yucatán en el siglo XX (1900-1964); Prensa y poder en el neoliberalismo (1982-2001); Las Haciendas henequeneras a través de la historia; Nos llevó el tren (ferrocarrileros) y otros.