jueves, 12 de enero de 2017

enero 12, 2017
Pedro Echeverría V.

1. En estas fechas, pero en 2005, comenzó a arreciar la campaña del presidente Fox y los empresarios para desaforar a Andrés Manuel López Obrador (AMLO), entonces encabezando el gobierno de la CDMX, para llevarlo a la cárcel. Parece que ahora pretende repetirse esa campaña –ahora del presidente Peña Nieto contra el mismo AMLO- acusándolo de ser el principal instigador (junto con la diputada Rocío Nahle y el exdiputado luchador social Fernández Noroña) de las grandes manifestaciones contra el “gasolinazo” que han agitado la renuncia a la Presidencia de Peña. No tengo duda que es la misma estrategia que en Fox fue un fracaso y que en Peña volverá a beneficiar a López Obrador en estos momentos en que se multiplican las posibilidades de AMLO de ganar y asumir el cargo. Diría a Peña que le siga. Pero todavía no podemos adelantar juicios porque en política, como dicen por aquí: “a veces del plato a la boca se cae la sopa”.

2. Aunque tengo la convicción de que si a AMLO le permiten asumir la Presidencia por los grandes empresarios, los EEUU, los medios de información, buscarán mantenerlo todo el tiempo muy bien atado y amenazado para que no tome decisiones importantes; seguramente muchas cuerdas que atan al pueblo podrán romperse y, eso sería una enorme experiencia. La realidad es que mis deseos e ilusiones son que los trabajadores asuman de manera directa el gobierno y el poder, pero no encuentro ninguna posibilidad hoy en México; sin embargo, si en México se organizara un gobierno como el de Chávez, de Lula, de Evo, creo que sería una maravillosa coyuntura para cambiar un poco en México. Nada cambiaría de raíz como son nuestras ilusiones, pero se abrirían algunas coyunturas que nos darían mejores oportunidades para movilizarnos y presionar; hoy todo parece muy distinto si tomamos en cuenta que Peña marcha hacia la mayor militarización del país.

3. La ingeniera Rocío Nahle, a quien recuerdo en la caravana Mérida/DF electricista contra la privatización en noviembre de 2003, subió a nuestro autobús para explicarnos la situación petrolera en Coatzacoalcos y el país; hoy es la valiosa coordinadora de los diputados de Morena y ha demostrado en sus intervenciones ser especialista de lo mejor en conocimiento profundo del problema petrolero. Fernández Noroña ha sido para mí el diputado más brillante, más cuestionador y valiente de cuantos han desfilado por el congreso. (Aunque tuvo a Muñoz Ledo como antecedente, hoy sólo es seguido por Layda Sansores y Manuel Bartlett) Por cierto me pregunto: ¿Para qué sirven 500 diputados y 128 senadores del PRI, PAN, PRD y demás partidos sino para gritar contra los críticos, levantar el dedo obedeciendo a su coordinador y para abrir la mano para cobrar su cheque millonario? Obvio, no les da vergüenza porque así nacieron.

4. Habría que decir que en las luchas sociales hoy en México si no hay bloqueos de carreteras, calles, edificios, centros comerciales, de manera permanente por el pueblo, habrá victoria –como siempre- del gobierno. Entonces hay que trabajar con el pueblo en ese sentido, por ese rumbo. En mi pueblo decían antes que “niño que no llora no mama”, pero ahora dicen que “niño que no grita, no patalea, no menta madres”, no le hacen caso porque las mamás dicen que ya no tiene leche”. Así que AMLO, Nahle, Morena, tienen que abrir y profundizar más su críticas para demostrar que son radicalmente diferentes y ganar en política de alianzas con el pueblo que está en las calles. Aplaudiría que los que marchan contra el gasolinazo se multipliquen, pero falta coordinación y demandas aglutinantes. “Fuera Peña Nieto” es buena consigna, pero el gobierno y sus aliados parecen cansar el movimiento. Hay que continuar buscando unidad y la coordinación. (12/I/17)