SAN JOSÉ, Costa Rica, 15 de noviembre de 2016.- La Tricolor firmó una de esas victorias que quedan grabadas en la retina y cargan de alegría a un país que no se empacha con las mieles del triunfo.
La presa de turno no podía ser otra que Estados Unidos, el rival que se acostumbró a salir cargado de moretes de territorio patrio. Antes, EE. UU. se llevaba tres en su saco, anoche fueron cuatro y pudieron ser muchos más.
La Mayor no tuvo piedad de un oponente que quiso y no pudo, que pagó con dureza la fragilidad defensiva ante hombres que querían comérselos vivos. Y lo hicieron. El marcador lo dijo todo.
Los estadounidenses tejieron una telaraña que atoró a la Sele, pero que después se rompió por completo.
Aunque la iniciativa siempre salió de las botas nacionales, el orden defensivo de los hombres de Jurgen Klinsmann provocó que a la Mayor se le complicara el duelo en la primera parte.
Jurgen Klinsmann dijo: 'Es muy decepcionante, es difícil de digerir dos derrotas en el inicio' pero qué le quedaba sino 'Felicitar a Costa Rica, hicieron un gran partido'. (@StevenOviedoA23) |
Sin someter por completo a los visitantes, las mejores ocasiones de quebrar el marcador fueron generadas por la Tricolor.