domingo, 11 de septiembre de 2016

septiembre 11, 2016
MÉRIDA, Yucatán, 11 de septiembre.- Hubo una época en México durante la cual cualquiera que osara criticar al Presidente de la República o a alguna autoridad iba a la cárcel, era reprimido, recibía su "calentadita" y finalmente era censurado.

Para que todos lo vean, José Manuel Lueje Bueno pidió ayuda en el muro de Deyanira Álvarez "Doctora Mariposa" para ponerle un alto a la Libertad de Expresión.

La libertad de expresión en México dista de ser plena, sin embargo hoy en día cualquiera puede mentarle la madre a un presidente, gobernador, alcalde, senador, diputado, etc. sin temor a perder la libertad o incluso la vida por ello.

A pesar de que nos falte mucho hemos mejorado. Por ello extraña que entre las voces que piden regresar al régimen del viejo PRI se encuentre la de un joven en una edad cuando uno busca hacer las cosas diferentes, luchar por la libertad y la justicia, no acallar a aquéllos que nos critican.

Cualquiera que defienda la libertad de expresión, el derecho a criticar, señalar, cuestionar e incluso burlar, debe ver con cierta preocupación y como motivo de alarma la aparición de "politiquillos" que aún sin una pizca de poder y una ínfima presencia en las redes sociales hacen alarde de sus deseos represores y autoritarios.

Éste es el caso de José Manuel Lueje Bueno, quien contactó públicamente a Deyanira Álvarez -la cual interpuso y ventiló una denuncia falsa y frívola contra el reportero de la fuente, tal como le ha hecho en el pasado a gran cantidad de personas- pidiéndole asesoría para "ponerle un alto" a un reportero por atreverse a publicar notas críticas sobre su persona y contactarlo para cuestionarlo.

Esto es, buscar la manera de pervertir el sistema de justicia para aplastar a una voz crítica, posiblemente con miras al 2018.

Es especialmente grave la aspiración represora de Lueje, pues apenas el año pasado fue candidato a diputado local por el Partido Humanista. ¿Qué haría si tuviera los recursos y el poder para callar, por la fuerza, a sus críticos?

Aunque no estuvo ni remotamente cerca de ganar, es una persona que aspiró a un cargo, y por lo tanto pasó a ser un personaje público sujeto al escrutinio y la crítica de los medios impresos, televisivos y en la web.

Aunque originalmente iba a contender por uno de los distritos de Mérida, se tuvo que conformar con el VIII cuando la dirigencia de dicho instituto político se entregó al PRI y respaldó a sus candidatos.

Lueje apenas superó los 200 votos en un distrito que comprende varios municipios. Sin embargo su fracaso no puede atribuirse únicamente a su desempeño como candidato, pues el Partido Humanista arrojó resultados tan pobres que perdió su registro.

El mencionado se ha desempeñado como "Facilitador de Desarrollo Comunitario" en la Fundación Haciendas del Mundo Maya, actividad que le ha permitido tomarse fotos para Facebook y seguir "vigente" -tan vigente como un candidato con menos de 300 votos puede serlo- en ciertas comunidades.

Tras su aplastante derrota, Lueje encontró refugio en la asociación civil Poder Ciudadano Colectivo 4 de Julio, encabezada de facto por José Luis Sierra Villarreal.

El ex candidato se sumó a dicha agrupación junto con Armando Torre Puerto, Gustavo Herrera Rosado y Alan Castillo Ávila, quienes como él han hecho esfuerzos -a la fecha infructíferos- por figurar y ser protagonistas de la noticia, con algunas ideas con mayor sustento que otras aunque sin un plan de trabajo definido y con objetivos a largo plazo.

El último mencionado, cabe destacar, estuvo al igual que Lueje en el Partido Humanista y, como él, tampoco renunció indignado cuando el PH se entregó al PRI voluntariamente.

No nos callarán. (José Repetto)