viernes, 1 de julio de 2016

julio 01, 2016
MOSCÚ, Rusia, 1 de julio.- La cadena estatal rusa Rossia anunció hoy el lanzamiento de un programa de reality show en el que los concursantes se disputarán el puesto de ayudante del líder de la república norcaucasiana de Chechenia, Ramzán Kadírov.

«Los concursantes deberán demostrar en cada momento que pueden cumplir a tiempo y bien con las objetivos marcados, que son capaces de superar cualquier adversidad para poner en marcha los proyectos más interesantes junto al jefe de la república», según un comunicado del canal, integrado en la Corporación Estatal de la Radiotelevisión de Rusia.


En el proyecto podrán participar personas «de cualquier sexo, edad o estatus social, que tendrán la oportunidad de trabajar al lado de Ramzán Kadírov» si ganan el programa, que premia con el cargo de director de la Agencia de Desarrollo Estratégico de Chechenia.

«Cualquier aspirante tendrá la oportunidad de demostrar sus cualidades y habilidades», dijo a la agencia RIA Nóvosti el portavoz del líder checheno, Alvi Karímov, quien precisó que el nombre del vencedor lo decidirá, «por supuesto, el propio Kadírov».

El canal Rossia, sin dar más detalles del formato, explicó que los concursantes «tendrán que demostrar de lo que son capaces (...) al subir montañas, bajar hacia lagos, recorrer senderos forestales y sentir plenamente la hospitalidad y las tradiciones» de la montañosa región.

«Estoy seguro de que averiguaréis muchas cosas nuevas e interesantes sobre la República de Chechenia», indicó Kadírov a los televidentes rusos a través de Instagram.

Algunos expertos han apuntado que el programa persigue mejorar la maltrecha imagen pública del polémico gobernante, que encabezó la conflictiva república en 2007, con apenas 30 años.

La oposición liberal rusa lo ha acusado de estar implicado en el asesinato frente al Kremlin del líder opositor y ex viceprimer ministro ruso Borís Nemtsov, el año pasado.

También es acusado por la oposición y activistas de derechos humanos de estar detrás de la muerte hace diez años de la periodista del periódico Nóvaya Gazeta Anna Politskóvskaya y de la activista chechena Natalia Estemírova (2009).

«Sólo molesto a los cómplices del Departamento de Estado (de EE. UU.)», según el líder checheno, quien hace unos meses calificó a la oposición liberal de «enemigos de pueblo», acusación esgrimida en su tiempo por el dictador soviético Iósif Stalin para lanzar sus masivas y sangrientas represiones.

Pese a todas las críticas, el presidente ruso, Vladímir Putin, ha defendido a capa y espada a Kadírov, al que ha elogiado por estabilizar su república, antes el polvorín del Cáucaso, al descabezar a la guerrilla separatista e islamista y mejorar el nivel de vida de su pueblo. (EFE / El Mundo)