sábado, 2 de julio de 2016

julio 02, 2016
NUEVA YORK, 2 de julio.- El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, condenó hoy el mortal ataque terrorista lanzado contra un restaurante en Dacca, capital de Bangladesh, y expresó su esperanza de que "los responsables de este crimen sean identificados y llevados ante la justicia".

El secretario general, expresó en un comunicado emitido por su vocero su "más profunda solidaridad y condolencias" a las familias de las víctimas y al gobierno y al pueblo de Bangladesh.

Las nueve víctimas italianas. Enlace a galería de los fallecidos y del atentado.

"Desea una pronta recuperación de los lesionados", dijo el comunicado.

"El secretario general espera que los responsables de este crimen sean identificados y llevados ante la justicia", señaló.

"Se mantiene firme en apoyo a Bangladesh mientras enfrenta esta amenaza y subraya la necesidad de intensificar los esfuerzos regionales e internacionales para evitar y combatir el terrorismo", indicó el comunicado.

"El secretario general asegura al gobierno de Bangladesh que Naciones Unidas está preparada para ayudar en los esfuerzos destinados a evitar el violento extremismo en todas sus formas", añadió el comunicado.

Un grupo de hombres armados mataron a 20 personas luego de atacar un restaurante español en Dacca el viernes por la noche, en la peor crisis de rehenes en Bangladesh, indicó hoy un vocero del ejército de Bangladesh.

Por lo menos 40 personas, incluidos altos oficiales de policía, resultaron lesionados en el incidente.

Alrededor de 13 rehenes, entre ellos un japonés y dos cingaleses, fueron rescatados después de una operación de dos horas de comandos del ejército.

Luego de planear y esperar durante la noche, las fuerzas conjuntas del ejército de Bangladesh tomaron por asalto el lugar a las 7:40 hora local (01:40 GMT) de este sábado.

Más de mil balas se dispararon y se escucharon explosiones en los primeros 30 minutos del asalto cuando soldados en vehículos blindados derribaron un muro del restaurante y los comandos pudieron ingresar por el espacio abierto. (Xinhua / Repubblica)