domingo, 12 de junio de 2016

junio 12, 2016
ORLANDO, Florida, 12 de junio.- Violento, inestable y homfóbico: así describen al estadounidense de origen afgano que juró lealtad al Estado Islámico antes de perpetrar el peor ataque desde los atentados de 2001 en Estados Unidos al abrir fuego en una discoteca gay de Orlando, Florida.

Los primeros informes de antecedentes del autor del tiroteo que dejó 50 muertos y 53 heridos en la madrugada del domingo en el club Pulse dan cuenta de un hombre violento que profesaba odio por los homosexuales.

Omar Mateen, de 29 años, que murió en un tiroteo con la policía, era un ciudadano estadounidense musulmán de origen afgano.

La policía investiga si tuvo motivaciones terroristas, o si tuvo vínculos o inspiración del terrorismo islamista.
Omar Mateen, el asesino.

¿Qué tenía en la cabeza este hombre que entró al Pulse con un rifle de asalto y un revólver para perpetrar esta masacre?

El FBI informó que llamó al 911 poco antes del tiroteo para expresar lealtad al grupo yihadista Estado Islámico.

Por su parte, los familiares entrevistados reconocen los defectos de Mateen, que trabajaba como guardia de seguridad, pero afirman que no era demasiado religioso, en momentos en que sus “simpatías” por el movimiento islamista son investigadas por el FBI.

Sin embargo, destacan su carácter violento y su homofobia.

En shock, el padre de Mateen, Mir Seddique, dijo que su hijo estaba furioso tras haber visto recientemente a dos homosexuales besándose en una calle de Miami.

“Estábamos el centro de Miami, en Bayside, había gente tocando música”, contó el padre a NBC. “Y vio entonces a dos hombres besarse frente a su mujer y su hijo y enfureció”, dijo Seddique.

“Se besaban y se tocaban y me dijo: mira eso. Frente a mi hijo, hacen eso”, añadió.

El ataque, el más mortífero desde los atentados del 11 de setiembre de 2001 en Estados Unidos, se produjo en el club Pulse, una conocida discoteca gay de Orlando.

“Estamos en shock como todo el país”, agregó Seddique. “Esto no tiene nada que ver con la religión”.

Nacido en Nueva York en 1986, Mateen se mudó con su familia a Florida, donde inició estudios de derecho en la universidad estatal Indian River.

En 2009, se casó con su primera esposa, de la que se divorció en 2011, según documentos judiciales conocidos por la AFP.

En una entrevista, esa exesposa afirmó que lo abandonó en 2011 por temer por su vida, y añadió que era abusivo y violento.

“No era una persona estable”, dijo al diario The Washington Post la mujer, que no se identificó para resguardar su seguridad.

“Me pegaba. Podía llegar a casa y empezar a pegarme solo porque la ropa no estaba lavada o algo por el estilo”, dijo al Post.

Según su relato, ambos se conocieron en Nueva York pero en marzo de 2009 se mudaron a Fort Pierce, Florida.

Frente a la violencia cada vez mayor, la mujer pidió ayuda a sus suegros, que la sacaron del apartamento que compartía con Mateen, de quien luego se divorció.

“Ellos literalmente salvaron mi vida”, dijo de sus suegros la mujer.

La exesposa describe Mateen como una “persona privada” y no particularmente expresiva sobre su fe musulmana.

Dijo que poseía un revólver de pequeño calibre por su trabajo como guardia de seguridad en un centro de reclusión para delincuentes juveniles.

Según el FBI, Mateen llamó dos veces la atención de los investigadores, en 2013 y 2014, por presuntos vínculos con extremistas islamistas, pero nunca encontraron pruebas en su contra.

Según el Departamento de Agricultura y Servicios del Consumidor de Florida, la licencia de porte de armas de Mateen expira en septiembre del próximo año. (AFP)