jueves, 5 de mayo de 2016

mayo 05, 2016
CIUDAD DE MÉXICO, 5 de mayo.- La crisis por la que atraviesa Venezuela está tomando tintes alarmantes y el gobierno de Nicolás Maduro tiene los días contados, pues la oposición espera celebrar en noviembre el referéndum revocatorio y ganarlo, dijo el secretario ejecutivo adjunto de la opositora Mesa de la Unidad Democrática en Miami (MUD-Venex), Horacio Medina.

El 3 de mayo, la oposición entregó al Consejo Nacional Electoral más de 1 millón 800 mil firmas que recogió para activar el proceso revocatorio de Maduro, aunque la obligación era sólo entregar 200 mil.

Horacio Medina señaló a Excélsior que “la MUD continuará presionando con el referéndum revocatorio, que se convertirá en un instrumento de organización, movilización y concientización. Dentro del análisis de escenarios que hemos venido adelantando, realizar el referéndum revocatorio y ganarlo es un escenario posible y con probabilidad alta de ocurrencia, lo ubicamos a finales del mes de noviembre”, sentenció.

El presidente venezolano Nicolás Maduro salió ayer a denunciar que la oposición había falsificado gran parte de las firmas presentadas por el referéndum revocatorio de su mandato. Maduro hizo la afirmación horas después de que la oposición entregara al Consejo Nacional Electoral (CNE) 1.850,000 firmas que recolectó en tres días la semana pasada. Esta cifra representa casi 10 veces el número requeridos para solicitar la consulta, ya que sólo se necesitan 195,721 firmas, o el 1% del padrón electoral.

Dijo que “la victoria electoral (en las legislativas) del 6 de diciembre tuvo un efecto muy positivo, permitiendo confirmar lo que se percibía por meses: el país sensato, el país democrático pide un cambio en el modelo político”.

Pero antes de poder concretar el referéndum, la oposición ha tenido que sortear diferentes obstáculos de los que se vale el gobierno para impedirlo, utilizando, por ejemplo, al Tribunal Supremo para frenar todas las iniciativas en la Asamblea Nacional, dominado por la oposición.

Medina dijo que “más allá de las arbitrariedades y violaciones sistemáticas a la Constitución, que paradójicamente se instrumentan desde la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, los diputados electos por la alternativa democrática encarnada en la MUD tienen un compromiso con los ciudadanos que le dieron su confianza, su voto con la encomienda de producir un cambio en el modelo político de Venezuela”.

"La conformación de una mayoría absoluta en la Asamblea Nacional le impone al régimen tomar decisiones y acciones poco convenientes en lo político de cara a mantener la fachada que muestra su supuesto carácter democrático, pero que cada vez le resulta menos creíble”. agregó.

Maduro ha tomado en los últimos días varias medidas para paliar la ofensiva opositora y la crisis económica, política, energética y social.

Por ejemplo, anunció que los trabajadores de gobierno sólo trabajarán dos días a la semana, un recorte de consumo de energía de cuatro horas –debido a una crisis de abastecimiento– y un incremento de sueldo de 30 por ciento.

En ese sentido, Medina dijo que “la crisis del sector eléctrico no es un asunto coyuntural, ni atribuible a El Niño. Se trata de un problema estructural por el incumplimiento e inconsistencia de la planificación a mediano y largo plazo, el mantenimiento insuficiente, la exclusión de la Comisión Nacional de la Energía Eléctrica  y por la poca transparencia en los procesos de adquisición de equipos en licitaciones internacionales, lo cual derivó en incontables hechos de corrupción”.

Respecto al apoyo que da el ejército al Maduro, el líder opositor dijo que “resulta increíble que el propio ministro de Defensa (Vladimiro Padrino) haga una declaración pública anunciando que se está fraguando un golpe de Estado y surge de inmediato la pregunta: ¿acaso los golpes de Estado no los dan los militares activos?, entonces, ¿cómo el ministro de Defensa, en vez de actuar, hace denuncias públicas?, ¿qué pretende?”

Esa denuncia encontró eco y apoyo en el todopoderoso expresidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, quien dijo que ‘habría un golpe de Estado el próximo 14 de mayo’; sólo le faltó decir la hora. Esto, a nuestro modo de ver, es reflejo inequívoco de la desesperación que se siente en el poder, que además revela su desconcierto por una oposición que no abandona su camino”, dijo Medina.

Para Medina, cada acción de desconocimiento de la Asamblea Nacional por parte del Ejecutivo y de los otros poderes, significa el incremento del apoyo popular, el desmarque de la opinión internacional y la suma de voluntades para producir el cambio democrático.

Sin embargo, aceptó que este continuo y sistemático proceder del régimen causa, en ciertos sectores de la población, una suerte de erosión en la confianza, genera un desasosiego con relación al futuro y, en algunos casos desmoraliza, enfatizó.

Busca anular poderes del Congreso

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, restringió por decreto las facultades de la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, para aprobar mociones de censura y remover a sus ministros, alegando que ello agravaría la crisis económica.

Se restringe y difiere (...) las mociones de censura que pudiera acordar la Asamblea Nacional contra los ministros o el vicepresidente ejecutivo, en las cuales solicitaren su remoción, hasta tanto cesen los efectos del decreto de emergencia económica”, indica la orden presidencial.

La medida se toma luego de que el pasado jueves, la mayoría opositora destituyera al ministro de Alimentación, Rodolfo Marco Torres, al votar una moción de censura que lo responsabiliza de la grave escasez de alimentos.

Maduro descartó remover al ministro, afirmando que la “decisión es írrita y nula” y por tanto “no existe”.

El decreto considera que la Asamblea está en desacato frente al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y actúa con una “mayoría burguesa circunstancial opuesta al orden constitucional” que ha “propiciado un clima de confrontación”.

El TSJ –al que la oposición acusa de estar alineado con el gobierno– modificó recientemente el reglamento interno y de debates de la cámara, lo que según Maduro invalida la moción de censura contra Marco Torres.

El 17 de marzo, la corte prorrogó por 60 días una emergencia económica declarada por Maduro en enero, dándole al gobernante poderes especiales en un escenario en que asegura hay “una crisis estructural del modelo rentista por la caída abrupta de los precios del petróleo”, a lo que añade un supuesto “boicot económico y financiero”.

Esos poderes autorizan al gobierno a disponer de bienes del sector privado para garantizar el abastecimiento de productos básicos, limitar el ingreso y salida de moneda local en efectivo y facilitar la entrega de divisas para agilizar las importaciones. (Israel López / Excélsior / Clarín)