jueves, 14 de abril de 2016

abril 14, 2016
GUANAJUATO, 14 de abril.- La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y Atención a Grupos Vulnerables del Congreso de Guanajuato, Luz Elena Govea López, ofreció disculpas “a quienes se hayan ofendido con mis declaraciones”, luego de que le pidió a un grupo de indígenas que no buscaran empleo en fábricas u oficinas sino que siguieran vendiendo nopalitos.

La diputada de Guanajuato, que es investigada por la Procuraduría de Derechos Humanos del Estado, afirmó que los grupos étnicos merecen respeto y señaló que no fue lo suficientemente precisa para hablar de las actividades de los indígenas.

“En mi concepto, y por mis orígenes, las comunidades indígenas merecen toda mi consideración y absoluto respeto a sus valores y costumbres, por lo que reconozco no haber sido lo suficientemente precisa al hablar del desarrollo de sus actividades, toda vez que mi intención no era ni es otra que la de exaltar la importancia que tienen para nuestra cultura y la preservación de nuestras tradiciones, lo que finalmente nos da identidad como mexicanos.



“En virtud de lo anterior, pido públicamente me disculpen a quienes haya ofendido con mis declaraciones”, indicó Govea López en un comunicado.

Al referirse a la queja 94/2016-A abierta por la Procuraduría de Derechos Humanos de Guanajuato en su contra, la legisladora dijo estar dispuesta a colaborar y a acatar las recomendaciones relacionadas con el caso y agregó: “es total la disposición para dialogar con el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred)”.

Además, la legisladora comentó que a todo mexicano le asiste el derecho de buscar mejores condiciones de vida y se comprometió a realizar acciones que armonicen y garanticen los derechos de los indígenas.

El 6 de abril pasado, durante una reunión con grupos de otomíes y pames, la diputada Govea López les pidió no buscar nuevas oportunidades de empleo y mantenerse vendiendo nopales.

“No me las imagino en una fábrica, no me las imagino haciendo el aseo de un edificio, no me las imagino detrás de un escritorio, yo me las imagino en el campo, yo las creo en sus casas haciendo artesanías, yo las pienso y las visualizo haciendo el trabajo de sus comunidades indígenas”, dijo.

“Cuando escucho a los chichimecas y a los pames en los mercados de San Luis de la Paz vendiendo nopales es muy digno, es algo que necesitamos. Yo no sé quién lo haría si no lo hacen ustedes, no es indigno, es algo que necesitamos, es parte de nuestra cultura, de nuestra manera de vivir”. (animalpolitico.com)