martes, 23 de febrero de 2016

febrero 23, 2016
WASHINGTON D.C., 23 de febrero.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presentó esta mañana en la Casa Blanca su plan para cerrar la cárcel de Guantánamo, una medida que prometía desde su campaña electoral en 2008.

"Durante muchos años, ha sido claro que la prisión de Guantánamo no colabora con nuestra seguridad nacional sino que la socava", dijo Obama hoy en un discurso de 22 minutos.

El presidente estadounidense aseguró en ese sentido que la base de Guantánamo "es contraproducente en nuestra lucha contra el terrorismo porque lo usan para propaganda para reclutar terroristas".

La Casa Blanca ha identificado trece posibles instalaciones en Estados Unidos donde podrían trasladarse algunos de los prisioneros -los considerados demasiado peligrosos para dejarlos en libertad- actualmente detenidos en Guantánamo.  (AP)

En la prisión de máxima seguridad, ubicada en la base naval estadounidense en la Bahía de Guantánamo, en Cuba, Guantánamo quedan aún 91 presos, de las 780 personas que han sido encarceladas allí desde 2002. Cuando Obama asumió el poder en enero de 2009 había 245 presos.

El proyecto

"Hoy el Departamento de Defensa está enviando al Congreso nuestro plan para cerrar la instalación de una buena vez", dijo Obama, al agradecer al titular de la Cartera, Ashton Carter, y mencionó los cuatro principales puntos del plan.

El plan de Obama incluye en primer lugar el traslado de los 35 detenidos que han sido autorizados a viajar a sus países de origen o a otras naciones. Los otros tres puntos se refieren a los 56 prisioneros remanentes e incluyen: acelerar las revisiones periódicas de los motivos de su detención, "continuar usando todas las herramientas legales para lidiar con los prisioneros remanentes que siguen bajo detenciones de ley de guerra" y "trabajar con el Congreso para encontrar una locación segura en los Estados Unidos" para ellos.

De esa manera, Obama confirmó que el plan incluye el traslado de los prisioneros que no tienen autorización para viajar a cárceles de máxima seguridad dentro de Estados Unidos, un paso al que se oponen muchos miembros del Congreso, especialmente los republicanos, que tienen la mayoría legislativa.

El Congreso ya ha emitido varias prohibiciones al traslado de presos de Guantánamo a suelo estadounidense, además de aplicar restricciones al traslado a otros países, con el argumento de que los detenidos son una amenaza para la seguridad nacional.

El Pentágono comenzó a estudiar el año pasado lugares en los que reubicar a los detenidos dentro de Estados Unidos, incluidas instalaciones federales en Colorado, Carolina del Sur y Kansas, así como otras seis ubicaciones en bases militares.

Obama también señaló que el plan que envía al Congreso ahorraría 335 millones de dólares en 10 años y 1700 millones a lo largo de 20 años.

"Cerrar el capítulo"

"La primera vez que me postulé a la presidencia reconocí que la instalación debía ser cerrada. No era solo una opinión mía ni de la ultraizquierda. Mi predecesor, el presidente [George W.] Bush, dijo que él quería cerrarla", dijo Obama.

Respecto del cierre de la instalación dijo que "se trata de cerrar un capítulo en nuestra historia". "Refleja las lecciones aprendidas desde el 11 de Septiembre [de 2001]", agregó.

"Hagamos lo que es mejor para Estados Unidos. Hagamos lo que está bien", dijo. "No le quiero pasar este problema al próximo presidente", completó, respecto de las elecciones presidenciales del 8 de noviembre.

En su último discurso sobre el Estado de la Unión en enero pasado, Obama reiteró su promesa de tratar de cerrar Guantánamo, de la que dijo que es una cárcel "cara e innecesaria", antes de abandonar la Casa Blanca en enero de 2017. El cierre de la prisión de alta seguridad también era una de las exigencias de Cuba en el marco del deshielo entre Washington y La Habana. (La Nación / AFP)