sábado, 27 de febrero de 2016

febrero 27, 2016
Bajo Reserva Exprés y Bajo Reserva / Periodistas El Universal

Benjamín Robles Montoya.

En el Comité Ejecutivo Nacional del PRD aseguran que tienen pruebas de que nunca hubo un pacto en el que se acordara que el aspirante con mayor ventaja en las encuestas sería designado el candidato a la gubernatura de Oaxaca, como lo asegura el senador Benjamín Robles Montoya, quien hoy dice que dejará el partido tras no haber recibido la designación, pues entre otras inconformidades argumenta que no se cumplió el pacto.

En la dirigencia sostienen que quien no cumpliría con un pacto es don Benjamín, quien se comprometió a respetar los resultados y a mantenerse dentro del partido sin importar si lo favorecían o no.

El CEN, nos dicen, tiene los elementos para probar que no incumplió, habrá que ver qué pruebas tiene el senador Robles para justificar su salida del PRD y su intención de competir por la gubernatura arropado por otros colores.

Elecciones y traiciones en Oaxaca

Agustín Basave y Guadalupe Acosta Naranjo.

Enojadísimos, por cierto, andan en el equipo de Agustín Basave, dirigente del PRD, con los amagos del senador Benjamín Robles, quien habla de irse del partido por las “trampas” y las “traiciones” en la elección del candidato amarillo al gobierno de Oaxaca. Podrá aprobar una encuesta pero jamás el detector de mentiras, nos dicen cercanos al líder nacional. Jamás se acordó que una encuesta definiera la selección del aspirante, argumentan. ¿Por qué no culpa a los jefes de las corrientes que votaron en su contra en el Consejo Estatal oaxaqueño? ¿Por qué se va por la salida fácil de culpar al árbitro?, se preguntan. El caso Robles puede descomponer el panorama electoral en la tierra del mezcal y el queso de hebra, nos anticipan.

Tregua entre Agustín y Lupillo

En lugar de un pollito, los perredistas Agustín Basave y Guadalupe Acosta Naranjo se engulleron un pescadito para dirimir los malos entendidos y las agruras que produjeron las elecciones internas del candidato del PRD al gobierno de Oaxaca. Después de las amenazas del diputado federal Lupillo Acosta de dejar las filas del PRD, el líder amarillo lo convocó a comer en un conocido restaurante japonés de la Ciudad de México. Nos comentan que la charla duró varias horas y salieron a relucir diversos temas, entre ellos la fractura por la candidatura oaxaqueña y la supuesta intromisión del gobernador de la entidad, Gabino Cué. Al final, ambos perredistas se estrecharon la mano y acordaron una tregua a golpe de sashimi.

Promesas incumplidas en Chiapas

Como usted recordará, el Instituto Nacional Electoral removió la semana pasada a tres de los siete consejeros en Chiapas porque no garantizaron la equidad de género en el registro de candidaturas para los comicios estatales del pasado 19 de julio y por irregularidades en la integración del listado nominal de quienes participaron en el proceso para la elección de la figura de diputado migrante. Nos dicen que detrás de las acciones de los destituidos estuvieron Eduardo Ramírez, líder del Congreso del estado, y el subconsejero jurídico estatal Óscar Muñoz. A los ex funcionarios electorales les habrían ofrecido ser magistrados y consejeros de la Judicatura al terminar su mandato, pues Muñoz presume contar con acceso a los titulares del INE y Tribunal Electoral federal. Pero ahí, nos aseguran, ni lo conocen. ¡Puro cuento!

Avanza negociación de Mando Único
Muy apapachado salió el líder del PRI en San Lázaro, César Camacho Quiroz, de la reunión con los coordinadores parlamentarios de la Cámara de Diputados con los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y de Hacienda, Luis Videgaray. Nos cuentan que los dirigentes de las distintas fuerzas políticas en el Palacio Legislativo reconocieron al priísta mexiquense el manejo en los acuerdos y cómo han transitado las negociaciones en lo que va de la LXIII Legislatura. Otro dato muy relevante del encuentro fue la posibilidad de negociar el tema del Mando Único en materia de seguridad, pues los panistas empujan un sistema mixto, en el que intervengan las autoridades federales cuando haya necesidad y bajo la supervisión de un ente que cuente con autonomía, nos explican.