lunes, 8 de febrero de 2016

febrero 08, 2016
PEKÍN, China, 8 de febrero.- Con danzas, desfiles, cantos tradicionales y fuegos artificiales, los chinos dieron hoy la bienvenida al Año del Mono de Fuego, el Año Nuevo Chino, que según la tradición estará marcado por nuevas oportunidades.

Vestidos de gala en color rojo y dorado, que significa felicidad y riqueza, los chinos se congregaron en las principales plazas de Pekín y otras ciudades del país para recibir al Año Nuevo Lunar, que comienza de manea oficial este lunes y concluirá el 27 de enero de 2017.

El primer día del Año del Mono fue celebrado con júbilo, alegría y reuniones callejeras, en las que destacaron la tradicional danza del dragón, cánticos, desfiles y un espectáculo de fuegos artificiales, que iluminaron por completo el cielo de Pekín.

La explosión de cohetes fue significativamente menor que en años anteriores, debido a las restricciones de las autoridades y la prohibición de la venta de fuegos artificiales por la mala calidad del aire en la capital china, según un reporte de la edición electrónica del China Daily.

Enlace a galería de los festejos.

Para dar la bienvenida al nuevo año y atraer la buena suerte, las calles, comercios, restaurantes y casas se iluminan con faroles, luces y pantallas luminosas, en las que se observaron diferentes figuras de monos, en referencia al animal que regirá este Año Lunar.

Los empleados gubernamentales decoraron con luces 174 avenidas, 27 parques y atracciones turísticas y 28 zonas comerciales en el centro de Beijing, con más de 62 mil faroles rojos y más de siete mil luces y 730 mil luminarias decorativas.

Las celebraciones del Año Nuevo Lunar o Fiesta de Primavera, que son comparadas con la Navidad o el día de Acción de Gracias en Estados Unidos, es la festividad más importante de China, ya que es la única época que se pasa en familia.

Es costumbre que los hijos que han salido de casa, ya sea por casarse, por trabajo o estudiar lejos, viajen durante esta temporada hasta sus lugares de origen para estar con sus familias durante las festividades, que duran 15 días, tiempo de vacaciones para casi todos los chinos.

El gobierno ha establecido el Año Nuevo Lunar como festivo oficial, por lo que las empresas dan una semana de asueto a sus empleados para darles la oportunidad de regresar a sus lugares de origen o tomar vacaciones en el extranjero.

Además de visitar a la familia, los chinos cumplen los ritos o tabúes del primer día del nuevo año, incluyendo el evitar tomar medicamentos, lavarse el cabello, barrer o matar a algún animal o usar ropa vieja, ya que ello sería de mala suerte.

Algunas familias también evitan lavar la ropa, manejar cuchillos, sacar la basura en el primer día del año nuevo para asegurarse de que no tiren su buena fortuna y pasan obligatoriamente en familia, preferentemente en casa hasta tarde.

Las festividades del Año Nuevo Lunar no sólo se llevan a cabo en China, sino prácticamente en todo el mundo, en cualquier país donde haya inmigrantes chinos, como Nueva York, donde el Empire State Building, icono de la ciudad, se ha teñido de rojo para recibir al Año del Mono. (NTX)