sábado, 30 de enero de 2016

enero 30, 2016
Pedro Echeverría V.

1. Karl Marx (Alemania 1818/83) y Mijail Bakunin (Rusia/Suiza 1814/76) fueron los máximos representantes del marxismo y el anarquismo; combatieron con todas sus fuerzas la sociedad capitalista y participaron juntos en varias polémicas, particularmente en la Primera Internacional. Ambos se hicieron reconocimientos mutuos por el trabajo intelectual y política que realizaban pero se confrontaron por sus concepciones básicas acerca de la revolución. Mientras que para Marx la revolución debería ser encabezada por el proletariado de la gran industria capitalista e instaurar una dictadura transitoria del proletariado; para Bakunin la rebelión debería ser encabezada por todas las clases oprimidas y establecer una sociedad igualitaria sin gobierno.

2. Alrededor de quien encabezaría la revolución comunista y qué tipo de Estado o gobierno se establecería estuvo la gran división entre las fuerzas de los trabajadores que luchaban contra la explotación y la opresión capitalistas. En Marx estaba la idea de una sociedad capitalista desarrollada, de una clase obrera, de un partido, un Estado y un gobierno que camine hacia la desaparición de las clases y la instauración del comunismo; en Bakunin estaba la idea peligrosa del partido, Estado y gobierno que se transforme en una nueva clase dominante que restaure el capitalismo. El marxismo se propagó en Rusia, en los países del Este, en China, en Cuba, se habló de una burocracia, de una nueva clase dominante con buena o mala interpretación de Marx.

3. El anarquismo nunca se planteó ninguna revolución para construir un Estado; promovió esencialmente la rebelión, la rebeldía, la concientización contra todo poder, sea  en la familia, la iglesia, escuela, los partidos, gobiernos, títulos. Buscó construir sociedades pequeñas autogestivas que se autogobiernen y sigue adelante.  El marxismo y el anarquismos no han dejado de cambiar o reformas sus estrategias y gozan de buena salud a pesar de que el capitalismo y el imperialismo han puesto todo para destruirlos. Todas nuestras experiencias tratando de destruir diferentes formas de explotación, opresión y mentiras del capitalismo –sin poderlos lograr- han sido ensayos difíciles pero no podrán nunca desanimarnos a los enraizados en nuestras convicciones. (29/I/16)