ROMA, Italia, 7 de septiembre.- La prisión salvadoreña de Penas Ciudad Barrios es una de las prisiones más peligrosas del mundo, hasta el punto de que incluso los guardias no entran dentro de la estructura, dejando en manos de los mismos presos que se organicen entre sí, tanto en cuanto a la comida como al cuidado de la salud.
La prisión, construida para albergar a 800 personas, es ahora el hogar de más de 2,500 prisioneros de la pandilla Mara Salvatrucha, tristemente famosos por sus crímenes y los tatuajes.
En 2013, el fotógrafo londinense Adam Hinton fue capaz de entrar en el edificio y retratar a los internos que se dejaron inmortalizar en estos retratos sorprendentes recogidos en el libro "MS-13", recientemente publicado por la editorial Panos.
En San Salvador, el problema de las guerras entre la delincuencia y las pandillas organizadas sigue sin resolver. En agosto, de hecho, las víctimas de la violencia callejera ha alcanzaron un récord nunca igualado desde la guerra civil, que terminó en 1992.
Fotografías del libro MS-13 por Adam Hinton © Adam Hinton / Panos. (Repubblica / The Independent)
