jueves, 3 de diciembre de 2015

diciembre 03, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 3 de diciembre.- Hoy se presentó el hallazgo de un importante documento para la historia de Yucatán, para la historia de la Iglesia yucateca, y para la sociedad meridana del siglo XVI. Se trata de una copia de un croquis de la catedral de Mérida fechado en el año de 1574, en tiempos del polémico obispo fray Diego de Landa, y que se encuentra en la ciudad de México resguardado en el Archivo General de la Nación.

Croquis de la Catedral que fue presentado hoy en rueda de prensa. Allí se encuentra la tumba de Andrea del Castillo y, por lo tanto, esto se considera un indicio de que allí se hallan los restos mortales de Francisco de Montejo "El Mozo".

El croquis fue elaborado para presentar gráficamente la distribución de las sepulturas que en aquel entonces se hallaban dentro de la catedral, y se conservó como parte de las pruebas de un conflicto entre dos personas por la posición de una tumba ocurrido en 1589. Los nombres de los conquistadores que aparecen con sepulturas son: Andrea del Castillo (esposa de Francisco de Montejo), Antonio de Maiorga, Fernando de Castro Polanco, Melchor Pacheco, Francisco Pacheco, Joan de Magaña, Marcos Rodríguez, Francisco Tamayo, Jerónimo de Castro, la tumba de Castañeda, Fernando de Bracamonte, Francisco de Magaña, Luis de Santa Cruz, Cristóbal Sánchez, Alonsso de Castro, Lucas de Paredes, Gómez de Castillo, Cristóbal de San Martín, Francisco de Arceo, Cristóbal de Rojas, Ana de Campos, Joan López, Nicolás de Aquino, Blas Hernández, Joan Bote, Jerónimo Pérez, Beatriz López viuda de Antón Julián,  Diego Hernández de Hoyos, Nuño de Castro, Juana Suárez, Diego Álvarez. Hay que decir que los nombres corresponden a aquellos que adquirieron en 1574 una un espacio para asiento y sepultura, y es importante apuntar que para 1589 en que se dio el conflicto por las sepulturas, muchos de los enlistados no habían muerto.

El documento ofrece información nueva, confirma la ya existente en la historiografía y reabre discusiones que se han dado en torno al antiguo edificio y a la sociedad meridana del siglo XVI:

1.- Confirma de que en 1588 la catedral ya se utilizaba para el culto, pues en el expediente que contiene el croquis se habla de actos litúrgicos como la misa y prácticas religiosas como los homenajes a los muertos.

2.- Confirma que las sepulturas ya se utilizaban, pues en el momento que trata el documento ahí estaban enterrados varios conquistadores, resaltando Hernando de Bracamonte.

3.- Muestra la disposición de las primeras sepulturas y asientos de la catedral con los nombres de los dueños. Los asientos eran literalmente eso, espacios que las élites ocupaban para sentarse en los ritos religiosos, y se hacían sobre la tumba de sus antepasados, por lo que comprar una sepultura aseguraba un lugar en la catedral tanto para vivos como para difuntos.

Este croquis podría ser el más antiguo de una catedral novohispana hallado hasta ahora

4.- Nos muestra gráficamente la posición de los primeros altares de catedral: El altar de Nuestra Señora del lado Izquierdo, el altar mayor en el centro, y el altar en el lado derecho dedicado a San Cristóbal. Estos altares debieron ser de mucha sencillez pues aún no se construían los retablos.

5.- Nos muestra el asiento del gobernador y de los oficiales reales ubicados en el altar mayor, espacios especiales para las autoridades en aquellos tiempos en que la Iglesia y la monarquía eran aliados.

6.- Muestra gráficamente el lugar en donde estuvo el coro del Cabildo catedral, en medio de la nave principal. Es posible que sólo se tratara del espacio con muebles temporales pues no hay registros de la existencia del coro de madera que se construyó posteriormente, aunque se menciona la existencia de la silla o trono episcopal, y junto a ella, el asiento del deán.

7.- Nos muestra el lugar en donde escogió su asiento y sepultura doña Andrea del Castillo, esposa de Francisco de Montejo el Mozo. Era común que las sepulturas fueran familiares encabezadas por un conquistador que de acuerdo a su importancia ocuparía un espacio. Este dato podría abrir nuevas discusiones en torno a la última morada de Montejo el Mozo, pues hacen pensar en la frase de Justo Sierra O’Reilly: “sus restos fueron depositados en la capilla de San Francisco, por no haberse concluido la Catedral, en donde se colocaron más adelante, aunque ya no parece el sitio”.

8.- La repartición de sepulturas se hizo en tiempos de Diego de Landa, cuando aún no se habían construido las bóvedas, y sólo se hallaban en pie las paredes del edificio.

Si bien los datos que ofrece el documento son de gran relevancia para la historia local, es también importante apuntar que este croquis podría ser el más antiguo de una catedral novohispana hallado hasta ahora, y permitirá estudios para la arqueología, la arquitectura, las devociones, las costumbres funerarias hispanas, las prácticas elitistas novohispanas, la religiosidad, la jerarquía eclesiástica, entre muchas otras posibilidades de acercamiento.

El documento fue hallado por Víctor Hugo Medina Suárez, licenciado en Historia por la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán, y doctor en Historia por El Colegio de Michoacán. Actualmente el doctor Medina es profesor-investigador en la mencionada facultad, y realiza investigaciones en torno a la Historia de la Iglesia Yucateca, al análisis de la imagen como fuente para la historia, y a la reflexión sobre las devociones religiosas en iglesias, capillas, haciendas, y oratorios domésticos. El doctor Medina ha escrito una obra titulada “La consolidación del clero secular en el obispado de Yucatán, siglo XVIII” misma que se encuentra en proceso de publicación.

El hallazgo se logró con recursos de la Facultad de Ciencias Antropológicas en el contexto de una estancia de investigación en la ciudad de México que tuvo el objetivo de traer a Mérida documentación fotografiada para poner al servicio de los alumnos tesistas interesados en estas temáticas.

Es importante mencionar que esta presentación del documento fue impulsada por la Comisión de Arte Sacro de la diócesis de Yucatán que dirige el presbítero arquitecto Pedro Mena Díaz, y avalada por el Cabildo de la Catedral de Mérida. La Iglesia de Yucatán está y ha estado interesada en difundir su Historia, y para eso lleva a cabo importantes esfuerzos como es la reestructuración del Archivo Histórico de la Arquidiócesis de Yucatán, y la reinstalación del Museo de Arte Sacro, ambos en el ex convento de Conkal.

En los próximos meses saldrá a la luz pública un trabajo académico, obra del doctor Medina, en donde se abordaran a profundidad algunos de los temas que permite reflexionar el croquis de la Catedral, con el fin de difundir el conocimiento a toda la sociedad. (UADY)