domingo, 8 de noviembre de 2015

noviembre 08, 2015
WASHINGTON D.C., 8 de noviembre.- "Sin un desarrollo rápido y climáticamente inteligente (...), el cambio climático podría empujar a más de 100 millones de personas a la pobreza para 2030", dice el documento publicado a tres semanas de la conferencia de París sobre el clima COP21.

La advertencia del Banco Mundial aumenta la presión sobre los líderes del mundo que se reúnen en París desde el 30 de noviembre para la conferencia COP21, con el objetivo de concluir un acuerdo internacional que limite los gases que producen el efecto invernadero.

También se produce pocos días después de un informe de la ONU el cual advirtió que los compromisos de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero son, por sí solos, insuficientes para conseguir limitar el calentamiento global a 2 grados centígrados.

El Banco Mundial señala que el impacto sería particularmente fuerte en África, donde el cambio climático podría conducir a un incremento en los precios de los alimentos de hasta un 12% en 2030.

Kenianos arastran bidones de agua. (Reuters)
Sería "un golpe muy duro en una región donde el consumo de alimentos de los hogares más pobres representa más del 60% de sus gastos", dijo la institución.

Un efecto similar ocurriría en el sur de Asia. En India, las crisis agrícolas y la proliferación rápida de las enfermedades resultantes de las perturbaciones climáticas podrían empujar a 45 millones de personas por debajo del umbral de la pobreza extrema (es decir, con un ingreso de menos de 1,90 dólares diarios).

El impacto también se dejaría sentir en los servicios de salud.

Un calentamiento global de 2 a 3 grados centígrados con respecto a la temperatura existente antes del inicio de la era industrial podría aumentar en 5% el número de personas expuestas a la malaria, es decir un incremento de 150 millones de personas, según el Banco Mundial.

La incidencia de las enfermedades diarreicas también podría aumentar un 10% en los próximos 15 años, señala el mismo informe.

A principios de octubre, el Banco Mundial había recibido con satisfacción los avances en la lucha mundial contra la pobreza extrema, señalando que este año iba a disminuir a un nivel sin precedentes, afectando a menos del 10% de la población mundial, 702 millones de personas.

Pero este avance podría verse en peligro por el aumento de las temperaturas a nivel global, señala el informe divulgado este domingo.

"No va a ser posible poner fin a la pobreza extrema si no se toman medidas enérgicas para mitigar la amenaza que el cambio climático representa para los pobres y si no reducimos las emisiones nocivas de forma masiva", dijo el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, citado en un comunicado.

Por ello, el Banco Mundial llama a la implementación de un modelo de "manejo consciente del clima, rápido y solidario" que refuerce las capacidades de las poblaciones para resistir los riesgos climáticos.

Mejorar los sistemas de protección social y la puesta en marcha de sistemas de atención universal en salud son algunas de las propuestas del Banco Mundial, que asegura, sin embargo, que todo ello debe hacerse indispensablemente en forma coordinada a nivel global.

"A largo plazo, solamente una acción internacional inmediata y sostenida para reducir las emisiones globales de gases de efecto invernadero preservará a millones de personas de la pobreza", dice el organismo.

La institución reconoce que las medidas para frenar el impacto del cambio climático tendrán un "costo neto", pero añade que podrían, sin embargo, financiarse con el producto de un posible impuesto sobre el carbono.

Las naciones más ricas se han comprometido a asignar a los países del sur 100.000 millones de dólares anuales hasta 2020 para financiar la lucha contra el calentamiento global.

A principios de octubre, el Banco Mundial decidió aumentar su contribución para este propósito bajo la presión de la comunidad internacional. (lainformacion.com / AFP)