lunes, 9 de noviembre de 2015

noviembre 09, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 9 de noviembre.- Con la finalidad de salvar más vidas y atender en forma inmediata a pacientes con síntomas de infarto, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) trabajan de manera coordinada en el programa "Código Infarto".


Este código se activa cuando llega el paciente al servicio de Urgencias del hospital al que pertenece, ya sea el Hospital General Regional (HGR) número Uno (conocido como T1) o al HGR No.12 "Benito Juárez"; donde posteriormente es derivado a la UMAE bajo un proceso de atención inmediata.

El personal del Instituto documenta el infarto agudo, otorga hospitalización inmediata, tratamiento básico (analgésicos, oxígeno, suero intravenoso, medicación específica). Además, si el paciente tiene menos de dos horas del inicio de los síntomas, será candidato a dilatación de la arteria obstruida por cateterismo cardiaco. Si tiene entre dos y seis horas del inicio de los síntomas, se le aplicará un medicamento en la vena para disolver el coágulo.

Todo el equipo de médicos ya tiene conocimiento de las acciones que deben realizarse hasta hospitalizar y lograr estabilizar al paciente.

El titular de Prestaciones Médicas del Instituto, doctor Jorge Martínez Torres, reiteró que para obtener mayor efectividad también es importante orientar a la población sobre los síntomas, las causas y consecuencias de este mal; así como de las recomendaciones para prevenirlo.

Según el registro más reciente, se han atendido 50 casos de infarto al miocardio en la UMAE del IMSS Yucatán.

El infarto agudo está condicionado por la oclusión total o parcial de una arteria del corazón; produce dolor intenso en el pecho que puede abarcar el brazo, cuello, mandíbula, porción alta del abdomen e incluso la espalda. Puede acompañarse de sudoración, náuseas, angustia, falta de aire, piel fría, mareo, desmayo y/o pérdida del conocimiento.

Si presenta alguno de los síntomas señalados anteriormente, es importante acudir inmediatamente al hospital más cercano, ya que eso podría salvarle la vida.

El especialista señaló que las personas con mayor riesgo de tener infarto, son: hombres mayores de 45 años de edad y mujeres de 55 años; fumadores, pacientes con diabetes, colesterol alto, con antecedentes de infarto previo, historia familiar de infarto, obesidad, sedentarismo y con triglicéridos altos

Para finalizar, el doctor Jorge Martínez recomendó: tener una alimentación balanceada, realizar actividad física y en caso de presentar algún padecimiento como la hipertensión, tomar de manera puntual los medicamentos que le son recetados por el médico. (Boletín)