WASHINGTON D.C., 31 de octubre.- El encuentro fue breve, pero muy emotivo. Alegre e informal y seguro no estaba en la agenda presidencial.
Un bebé disfrazado del papa sorprendió al presidente de Estados Unidos en la fiesta de Halloween, celebrada en los jardines de la Casa Blanca. (Los papás del pequeño deben creer en el Holywins)
El pequeñín en su minúsculo 'papamóvil' generó sonoras carcajadas del mandatario y la primera dama, quienes repartieron dulces para una larga fila de niños reunidos en la mansión presidencial para el tradicional trick-or-treat. (cnn.com)
