viernes, 16 de octubre de 2015

octubre 16, 2015
Pedro Echeverría V.

Solidaridad activa con los profesores cesados por el gobierno de Peña Nieto y Nuño

1. El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, aseguró que pese a los avances en el combate a la pobreza, México es el país más desigual de esta agrupación, que aglutina a los 34 países más desarrollados del mundo. Pero ese señor Gurría ha sido un personaje importante del gobierno mexicano en los últimos 35 años (secretario de Hacienda, de Relaciones Exteriores y candidato yanqui para la OCDE). Su apodo ha sido “el Ángel de la Dependencia” y ha jugado el papel de consejero máximo de los gobiernos de De La Madrid, Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto. No olvidaré que en 1986 –burlándose de Muñoz Ledo y Cárdenas- dijo que “el neoliberalismo privatizador es un sistema que llegó para quedarse por lo menos cinco sexenios”.

2. Que un tipo así sea tan funesto y reconozca una realidad que no se puede tapar porque ha sido denunciada mil veces, es un poco extraño. ¿Quién ignora ya en pleno siglo XXI que México es el país más injusto, de más extrema desigual del mundo por registrar a 100 millones de pobres y miserables, así como tener a 100 multimillonarios integrados a los más poderosos del mundo? Lo peor no son estos gobiernos y empresarios ladrones y asesinos que han dominado a este país en la miseria, sino que somos los trabajadores, los estudiantes, los militantes de la izquierda radical, que no hemos podido levantar al pueblo contra ese estado de cosas. A veces pienso que esos funestos funcionarios hacen esas declaraciones para demostrar que el pueblo de México aguanta todo por el trabajo ideológico que han realizado la iglesia y los medios de información.

3. La zona metropolitana del valle de México, que es locomotora de la economía mexicana, está perdiendo tracción, aseguró Gurría. En esta región, que comprende las 16 delegaciones del Distrito Federal, 59 municipios del estado de México y uno de Hidalgo, se produce prácticamente una cuarta parte, 23 por ciento, del producto interno bruto (PIB) nacional; sin embargo, la productividad se encuentra estancada; se requiere una segunda ola de reformas para enfrentar los desafíos estructurales que tiene México. Repasó: carencia de un sistema educativo, fallas en estado de derecho, hacer eficiente la justicia, falta de transparencia, acentuada corrupción, así como informalidad. Gurría declara, aconseja y regresa a la OCDE a servir a los yanquis. “La verdad puede salir hasta de la boca del carnicero” decía Marx.

4. Estas declaraciones del funesto Ángel Gurría –como las 100 mil que ha publicado nuestro héroe Julian Assange, encerrado hace tres años en la embajada de Ecuador en Londres por órdenes del gobierno inglés- sirven para reconfirmar lo que algunos denunciamos de manera puntual sin muchas pruebas. Podemos repetir con mayor fuerza que México no crece, que América Latina está dominada, que México (aunque no sea el país más miserable del mundo) es la nación con más extrema desigualdad: 100 millones de pobres y miserables, 19 millones de clase media y 100 mil millonarios y sus familias que gozan de enormes riquezas. Antes de morir alguien me reclamará: ¿“puta, con un 90 por ciento de pueblo pobre y miserable no pudieron hacer una revolución?

5. Con todo lo que se ve en México no es sencillo hacer una revolución “que ponga de pie todo lo que está de cabeza”, como decía Marx. La bronca es que tuvimos una revolución burguesa en 1910-17, una Constitución y un corporativismo que se adueñó de las principales demandas de los trabajadores; la bronca es que la burguesía gobernante creó y controló desde los 20 y 30 las organizaciones de trabajadores y empresariales para ponerlas a su servicio y la bronca es que el 99 por ciento de los intelectuales y partidos políticos se han sabido acomodar a las ofertas de cargos y dinero que la burguesías ha ofrecido de a montones. ¿Cómo levantar a los indígenas, campesinos, obreros, sectores populares y ciudadanos, a luchar por demandas que la misma burguesía tergiversa y absorbe?

6. Por ello Gurría, al tener la convicción del control que ejerce su clase, se burla. Él no ve a corto plazo, de manera inmediatista; parece tener una visión de largo alcance al tener la convicción de que mientras los EEUU tengan la hegemonía mundial nada importante pasará. Parece que en la izquierda hay que ser cortoplacista porque los problemas son permanentes y hay que defenderse de la diaria opresión. ¿Qué les pasaría a los profesores de la CNTE si un día dejaran de movilizarse, de protestar e impugnar las medidas privatizadores que el gobierno impone? Sucedería lo que pasa en el SNTE: un grupo de líderes vendidos al gobierno se adueña de las cuotas de 200 millones de pesos diarios que les sirve para corromper a los maestros para ponerlos en bandeja de plata al mismo gobierno.

7. Así que el cinismo de Ángel Gurría –que ha estado en el poder más de 30 años- no ha tenido límites. Habla de la situación desastrosa del país que él mismo ha contribuido a crear con todos los gobiernos que vienen desde 1982. Reconoce el desmadre de la economía, la política y la sociedad en México donde ha sido consejero privilegiado. Desde hace algunos años el imperio de los EEUU lo colocó en la OCDE para hacer lo que siempre ha hecho: servir a los intereses yanquis. La gran burguesía le debe un gran homenaje y un premio por lo bien que se ha portado; el trabajadores, por el contrario, por lo menos una buena patada por el fondillo que le llegue también a todos los gobiernos. (16/X/15)