SAN LUIS, Missouri, 11 de septiembre.- El candidato republicano Rick Perry anunció hoy en esta ciudad que suspende la campaña presidencial, a causa de sus problemas de recaudación.
"La competición es tremenda, la mejor en esta generación, así que me aparto sabiendo que nuestro partido está en buenas manos", dijo Perry, exgobernador de Texas, en un discurso.
"Les doy esta noticia sin remordimientos. Ha sido un privilegio para mí y un honor viajar por el país y hablar con los estadounidenses sobre sus esperanzas y sueños", añadió.
A causa de sus escasos fondos, Perry había dejado de pagar a su equipo de campaña a principios de agosto.
Su decisión se produce cinco días antes del segundo debate republicano. Perry iba a participar en el llamado debate de la Happy Hour, o de los segundones, ya que no consiguió clasificarse entre los aspirantes con mayor intención de voto en las encuestas.
En su despedida, Perry lanzó un dardo a Trump. "Degradar a la gente de descendencia hispana no es solo ignorante, traiciona el ejemplo de Cristo. Podemos hacer que se cumplan nuestras leyes y (que no se violen) nuestras fronteras, y podemos amar a todos los que viven dentro de nuestras fronteras, sin traicionar nuestros valores".
Es la segunda vez que Perry compite sin éxito por la presidencia.
En 2012, saltó a la fama en todo el país por un lapsus mental en un debate electoral que se volvió viral en las redes.
Perry se olvidó de lo que estaba contestando y no le quedó otra que decir “uuups” delante de millones de telespectadores. Aquel error arruinó su candidatura.
En esta campaña, Perry no ha conseguido despegar en las encuestas. En la media de encuestas recientes usadas por CNN para seleccionar a los candidatos que participarán en el debate, era el número 12 de los 17 aspirantes. (Univision / El País)
