jueves, 3 de septiembre de 2015

septiembre 03, 2015
PRAGA, República Checa, 3 de septiembre.- Juristas y activistas humanitarios denunciaron la práctica de la Policía checa de escribir números en los brazos de los refugiados que entran al país en tren, al más puro estilo nazi. Por su parte, las autoridades de la República Checa se defendieron, alegando que es necesario para identificar a las miles de familias que estos días pasan por su territorio rumbo a Alemania.

Esos números luego son escritos en el billete de tren que la policía secuestra. No sólo los adultos son marcados, sino también los niños. Un periódico local reportó el caso de una niña de 5 años dormida en la espalda de su madre durante un control y a la que le fue escrita "C5".


"Ninguna ley permite marcar a la gente de esta manera", declaró Zuzana Candigliota, abogada de la Liga Checa de los Derechos Humanos.

En Europa del Este, la práctica ha recordado inevitablemente a la utilizada por los nazis para identificar a los prisioneros de los campos de concentración.

En concreto, los policías checos utilizaron rotuladores para anotar números sobre la piel de un total de 214 refugiados, la mayoría sirios, que cruzaron la frontera el martes en varios trenes procedentes de Austria y de Hungría.

"El objetivo es que los niños no se pierdan", insistió una vocera del Ministerio checo del Interior. (infobae.com)