jueves, 27 de agosto de 2015

agosto 27, 2015
Juan Acuesta Rodríguez

Definitivamente se están dando los cambios y reacomodos políticos dentro del gabinete presidencial para preparar desde ahora la manera y estrategias que resultarán para enfrentar dentro de tres años los procesos electorales.

Estos cambios tan solo van a refrescar en mediana medida el quehacer político nacional, puesto que las estrategias de inicio en esta admistración han resultado un duro golpe político a Peña Nieto y su equipo y resulta imposible pensar que hagan marcha atrás en lo ya iniciado y avanzado. Lo que si es muy cierto es que este sexenio va cayendo en franca picada. Nunca se había escuchado que las Fuerzas Armadas estén molestas. Hoy se ha escucuchado y se está comentando.

Creo que para que haya una nueva composición del régimen actual, sería revisar y reestructurar las reformas ya planeadas y aplicarlas de la mejor manera posible, de tal forma que traigan beneficios a las masas populares y no a los grandes capitales.

Este presidente ofreció mucho al pueblo y no se ha visto una mínima parte de ese beneficio ofrecido, sino, por el contrario, más impuestos, una economía lamentable, una incertidumbre total en el sector salud, una guerra declarada al magisterio, una reforma energética fracasada, una serie de escándalos dentro de su gabinete y su misma persona. No es posible que un país como el nuestro prospere teniendo a unos cuantos ultramillonarios y a millones y millones de mexicanos en el hambre y la pobrea absoluta. No es posible que con bombo y platillo diga "estamos bien" cuando a diario siguen tantas ejecuciones y quieren dejar en el olvido a los 43 de Ayotzinapa. 

Es por eso que no exhorto, le suplico al Presidente de la República reordene sus filas y cambie el rumbo de su política en beneficio de los ciudadanos de este país. Con cambiar de cargo a las personas no es sufuiciente. Creo que con una política de fondo a favor del pueblo sería lo correcto. Creo que aún está en tiempo.

Es cuanto.