domingo, 2 de agosto de 2015

agosto 02, 2015
Bajo Reserva Exprés / Periodistas El Universal


Tras el divorcio de Guadalupe Acosta Naranjo de los Chuchos, hace unos días el diputado electo se encontró con el Chucho mayor, Jesús Ortega, y muy sonrientes posaron para la foto. Sin embargo, el pleito en la familia de los Chuchos va más allá, pues ahora Acosta disputa a la corriente hegemónica en el PRD la coordinación parlamentaria en la Cámara de Diputados para la legislatura que arranca en septiembre próximo. Aunque la  salida de Acosta de Nueva Izquierda es solo uno de los problemas de la crisis que enfrenta esa corriente perredista, y en general el partido. El principal problema, nos dicen, es que en los Chuchos hay insatisfacción con el desempeño de Carlos Navarrete Ruiz al frente del PRD. Nos aseguran que el actual presidente del partido también sabe que no ha hecho del todo bien las cosas, quizá por eso comenzó a contar entre el perredismo que quizá sea mejor que él deje la dirigencia del partido anticipadamente. Y ya está poniendo fecha: octubre de 2015, cuando su periodo termina en 2017. ‎Entre las corrientes comenzó a plantearse esa posibilidad. La idea es que si prospera, el próximo o la próxima persona que encabece el partido tenga los hilos bien agarrados para las elecciones del 2016, en la que una docena de gubernaturas estarán en disputa. La otrora familia feliz de los Chuchos parece que atraviesa por una severa crisis. Aunque para la foto todo sea sonrisas.

Los consentidos Tradeco y Grupo Higa



Desde la arena del Congreso de la Unión, el PRI y el PAN realizan forcejeos en la búsqueda de evidencias de presuntas pruebas de corrupción en el pasado gobierno federal panista —que tuvo de favorita a la constructora Tradeco, la que participó en el proyecto de la Estela de Luz— y en la actual administración priísta, que ha tenido contratos con el constructor Grupo Higa. Por el momento, los legisladores priístas han obtenido un pronunciamiento de la Comisión Permanente para que la Auditoría Superior de la Federación remita las observaciones por la actuación de Tradeco. Y el senador panista-calderonista Ernesto Cordero Arroyo ha exigido que Hacienda, Banobras y Comunicaciones y Transportes informen sobre los contratos obtenidos por Grupo Higa. La batalla, nos dicen, apenas comienza…

Fusiones en el gobierno federal

El proyecto de presupuesto base cero, que coordina el equipo del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, está contemplando fusiones en algunas áreas del gobierno federal. ¿De qué se trata? La administración federal realiza una suerte de escáner por las secretarías que integran el gabinete presidencial para determinar qué zonas son susceptibles de integración, para generar una mayor eficiencia y, desde luego, un menor gasto de operación. Nos dicen que el grupo de don Luis trabaja a marchas forzadas para enviar al Congreso el paquete económico 2016, a más tardar el 8 de septiembre. Dé usted por descontado que en las fusiones habrá menos personal y menos costo en el gasto corriente, ahorros en el gasto público para el próximo año fiscal que se verá impactado por la baja en el precio del petróleo.

Chuchos al borde de un ataque

Los jefes de la corriente Nueva Izquierda, conocida como Los Chuchos, andan desesperados. ¿Qué les está pasando? Nos cuentan que al presidente del PRD, Carlos Navarrete, lo traicionó su subconsciente hace unos días cuando habló en público de la posibilidad de renovar la coordinación del partido en el Senado. En la desesperación de ver perdido el liderazgo de la bancada amarilla en San Lázaro, Los Chuchos están ofreciendo a sus oponentes hasta lo que no tienen: la posición que detenta ahora Miguel Barbosa en el Senado. Jesús Ortega y Jesús Zambrano han puesto a remojar la barba o más bien dicho el bigote de Navarrete. De ese tamaño es la desesperación, nos comentan.

La tercera en discordia

Y en la disputa entre Jesús Zambrano y Guadalupe Acosta Naranjo por la coordinación de la bancada del PRD en San Lázaro en la LXIII Legislatura —que arranca el primero de septiembre—, la tercera en discordia, la diputada local y próxima legisladora federal por Chihuahua, Hortensia Aragón Castillo, sigue empujando durísimo al grado que el todavía líder del partido, Carlos Navarrete, la recibió para escuchar la petición de la señora para encabezar al grupo parlamentario perredista en la Cámara de Diputados. ¿Será que la corriente Foro Nuevo Sol y su representante Aragón tienen embolsado el apoyo de don Carlos?