domingo, 2 de agosto de 2015

agosto 02, 2015
Continuación de ¿La foto de Javier Duarte le costó la vida a Rubén Espinosa?

Ignacio Carvajal / sinembargo.mx

Araceli González, de Colectivo por la Paz, donde se agremian madres que buscan a sus hijos desaparecidos en situaciones de violencia, describe a Rubén Espinosa como un tipo convencido de la realidad de Veracruz y que eso lo llevaba en sus valores. Raro era verle siguiendo al gobernante (N. de la R. Javier Duarte, Gobernador de Veracruz).

Rubén Espinosa "se identificaba con esa indignación porque buscaba cambios desde el trabajo que hacia; le indignaba la inseguridad, la violencia las injusticias".

"Siempre era amable. En las manifestaciones o conferencias de prensa nos saludábamos. Tomaba fotos y se iba", cuenta la también encargada de la organización Equifonia, en pro de los derechos de mujer.

Gabriela Martínez, promotora de los derechos de los animales, lo ubica como "una de las personas más auténticas que he conocido. Era uno de los pocos periodistas que entendían las causas, las luchas sociales. Era muy objetivo y sus pensamientos eran filosofía pura".

"Era una piedrota en el zapato", define.


Rubén Espinosa Becerril fue encontrado sin vida en un departamento de la colonia Narvarte. En la escena había también cuatro víctimas más, mujeres, maniatados de pies y manos con cinta. Con señales de tortura y disparos de arma de fuego.

Rubén Espinosa se exilió de Veracruz porque era acosado por desconocidos. Sintió miedo después de que sujetos sospechosos daban cuenta de sus pasos al trabajo, casa y amigos. Esto comenzó luego de sus acciones, con otros periodistas, para cambiar el nombre a la plaza Lerdo a Plaza Regina Martínez -también corresponsal de Proceso-. La placa con el nombre de Regina fue retirada horas después de su colocación por parte de periodistas. Los reporteros la compraron nueva y la montaron otra vez. Rubén Espinosa tomó cemento blanco para fijar el trozo de metal a la escalinata, pero ni así la respetaron y a los pocos días la sustrajeron. Después de ese evento lo comenzaron a seguir desconocidos. Por eso se marchó al DF, desde donde sentenció: "La muerte escogió a Veracruz como su casa y allí decidió vivir".

En abril de 2013, la directiva de Proceso, la revista en donde colaboraba Rubén Espinosa, denunció la existencia de un plan tramado desde Veracruz para que un grupo de policías de ese estado viajaran al DF a ejecutar acciones hostiles contra Jorge Carrasco, quien estaba asignado por la revista para investigar el homicidio de Regina Martínez dentro de las propias pesquisas del semanario. El plan contemplaba ubicarlo, acopiar información personal y emprender acciones hostiles en su contra. La denuncia de Proceso fue retomada por organismos internacionales defensores de los derechos humanos y se brindó seguridad inmediata al periodista. Carrasco se tuvo que exiliar del país un tiempo y hasta la fecha sigue bajo resguardo.

En este tenor, el fin de Rubén Espinosa hace preguntarse a muchos periodistas por la posibilidad de que el poder hubiera retomado ese plan para adaptarlo al fotógrafo asesinado en la Colonia Narvarte.

Agencia Proceso relata: En septiembre del 2013, Espinosa fue golpeado por policías estatales acreditables durante el violento desalojo de maestros de la CNTE en la Plaza Lerdo, en vísperas del Grito de Independencia.

En esa ocasión el fotógrafo fue golpeado por elementos que lo obligaron a “formatear” la tarjeta de memoria de su cámara, para no tener ni una sola imagen del violento desalojo en septiembre del 2013.

Aunque Rubén Espinosa, junto con otros reporteros, puso una denuncia penal, el gobierno de Javier Duarte buscó interlocución con él, ofreciéndole dinero para retirar su querella. Espinosa rechazó el ofrecimiento.

El 9 de junio pasado, Espinosa participó en la recolocación de la placa Regina Martínez en la Plaza Lerdo, frente al Palacio de Gobierno.

Espinosa aseguró que en Veracruz no se pueden echar en saco roto “las intimidaciones”, “los acosos” y la vulnerabilidad en la que periodistas ejercen el oficio, por ello, decidió mejor exiliarse, antes que le pueda ocurrir algo de mayor gravedad.

En Xalapa, compañeros de Rubén Espinosa, quienes trabajan en medios como Proceso, AVC Noticias, Plumas Libres, Expediente Mx, La Jornada Veracruz, Sala Negra, entre otros, responsabilizan al gobierno de Javier Duarte y a la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz de cualquier agresión a su integridad física. (apro con información de Noé Zavaleta)