miércoles, 8 de julio de 2015

julio 08, 2015
WASHINGTON D.C., 8 de julio.- La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, afirmó que la "aguda" crisis de Grecia exige una reestructuración de la deuda y recordó que la institución está implicada en las negociaciones sobre el plan de rescate porque ese país "solicitó su asistencia".

En una conferencia en la Brookings Institution de Washington, la directora del Fondo subrayó la disposición del organismo a ayudar a Grecia a enfrentar la "aguda" crisis que sufre, y reiteró que el FMI siempre había defendido un enfoque que "combine la sostenibilidad de la deuda con las reformas estructurales".

La directora general del FMI, Christine Lagarde, dijo el miércoles que es "necesaria" una reestructuración de la deuda de Grecia y aseguró que está "comprometida" a encontrar una solución a la crisis en ese país. (DPA)

Lagarde recordó, además, que "si el FMI está involucrado es porque Grecia solicitó la asistencia; una vez que el Fondo está implicado, debe seguir sus normas y ser imparcial", dijo en referencia a la declaración en mora de ese país al incumplir un pago de 1,600 millones de euros la semana pasada.

Las palabras de la directora del FMI se suman a las del secretario del Tesoro de EE.UU., Jack Lew, quien también sostuvo la necesidad de plantear una reestructuración de la abultada deuda griega, un punto sobre el que los socios europeos, especialmente Alemania, se han mostrado reacios.

Lagarde defendió la actuación del Fondo en el programa de rescate a Grecia al asegurar que los préstamos de la institución "están condicionados a la restauración del crecimiento y la sostenibilidad de la deuda". "Eso no ha cambiado", reafirmó.

La exministra de Finanzas de Francia remarcó que el FMI había defendido el mismo doble planteamiento en los casos de los recientes rescates financieros a Irlanda y Portugal, en los que los programas habían "funcionado".

La pasada semana el Fondo publicó un informe en el que cifraba las necesidades de Grecia para un nuevo rescate en torno a los 50,000 millones de euros en los próximos tres años y apuntaba a la necesidad de una reestructuración de la deuda.

Actualmente, y después del referendo de planteado por el gobierno heleno del primer ministro Alexis Tsipras, en el que finalmente se rechazó la propuesta de los acreedores (FMI, Banco Central Europeo y Comisión Europeo), Atenas presentó una nueva propuesta para un tercer rescate que debe ser ahora analizada y aprobada por los líderes europeos en la cumbre que se celebrará el próximo domingo.
Mientras tanto, el Gobierno griego decretó la segunda prórroga del corralito impuesto hace diez días hasta el próximo domingo, después de que el BCE haya decidido mantener sin cambios la cantidad máxima de liquidez de emergencia que los bancos griegos pueden pedir al Banco de Grecia. (EFE)