martes, 5 de mayo de 2015

mayo 05, 2015
Historias de reportero | Carlos Loret de Mola Álvarez

En el mercado Bakaara de Mogadiscio rebeldes extremistas al servicio del sanguinario cacique Mohammed Aidid se esconden entre viejos edificios y puestos ambulantes.

Se pierden entre la gente para no ser detectados mientras combaten al ejército de Estados Unidos que llega al corazón de Somalia uniformado, en helicópteros y vehículos blindados.

De pronto, de entre el panorama urbano que le sirve de camuflaje, un miliciano somalí saca un lanzacohetes y dispara contra una de las aeronaves que apenas alcanza a maniobrar para aterrizar de emergencia en una plazoleta. Queda en llamas, sus ocupantes rodeados por el enemigo. 



La escena es de la famosa película La caída del Halcón Negro (Black Hawk down, 2001). Corresponde casi idénticamente a lo que vivieron los rangers de operaciones especiales estadounidenses el 3 de octubre de 1993… y los soldados mexicanos hace cuatro días en Jalisco, en la zona boscosa del camino entre Casimiro Castillo y Villa Purificación.

A bordo de un helicóptero Cougar, el comando de élite (dieciséis elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y dos de la Policía Federal) se encontró con el convoy en que se transportaba Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, uno de los líderes del Cártel Jalisco Nueva Generación, considerado hoy por hoy el más peligroso y poderoso de México. Así me lo han confirmado tres fuentes de primer nivel.

Los soldados volaron bajo para intentar capturarlo. Pero según los mismos informantes, El Mencho se desplaza con más de cien personas como cuerpo de seguridad. Desde tierra, los sicarios del capo lograron impactar la aeronave oficial con un lanzacohetes ruso RPG, el mismo que usaron los guerrilleros somalíes en aquel octubre de 1993 y que siguen empleando milicianos en Irak, Afganistán y Palestina.

Al brazo armado del Cártel Jalisco Nueva Generación le han detectado también lanzacohetes LAW (Light Anti-armor Weapon), de fabricación estadounidense, que circulan desde las guerras de Corea y Vietnam, y que son más precisos y más letales. Y hasta una fábrica de metralletas R-15 en el corazón de Guadalajara; les decomisaron material para producir 15 mil unidades.

Desde 2011 a la fecha, según reportes de inteligencia gubernamentales a los que tuve acceso, Oseguera Cervantes ha logrado escapar tres veces de las fuerzas federales y dos de las estatales, que consideran que se esconde en la zona serrana que alcanza territorios de Jalisco, Colima y Nayarit.

En las cinco ocasiones su gran ventaja ha sido su capacidad de repeler con armas de alto poder la presencia del Estado.

Funcionarios de todos los niveles tratan de ser optimistas en público. Off the record aceptan que en fechas por venir se seguirán viendo escenarios como el del fin de semana en Jalisco, Michoacán, Colima y Guanajuato.

SACIAMORBOS. Quejas de primera fila de que brincó de su altísimo cargo y nunca hizo nada con la información que recibió de que Jalisco Nueva Generación iba a terminar en lo que está terminando. Él ya está cómodo en territorio seguro.

historiasreportero@gmail.com