domingo, 3 de mayo de 2015

mayo 03, 2015
WASHINGTON D.C., 3 de mayo.- La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, sus siglas en inglés) lanzó una advertencia acera del Boeing 787 Dreamliner. La misma enuncia que una falla de software en los sistemas del avión podría súbitamente desconectar la energía eléctrica en pleno vuelo, causando la pérdida total de control.

“Estamos emitiendo este anuncio AD (Directiva de Aeronavegabilidad) para evitar la pérdida de toda la energía eléctrica de CA, lo que podría resultar en la pérdida de control del avión”, dijo la FAA a través de un comunicado oficial.


La falla, que fuera revelada en pruebas de laboratorio, involucra los generadores eléctricos de los Boeing 787. Los mismos pueden pasar a “modo a prueba de fallas” cada 248 días (aproximadamente 8 meses). Tras esta cantidad de días de uso contínuo de la planta de energía, las cuatro unidades de control del generador principal del avión fallarán simultáneamente. Si esto sucede durante el vuelo, despegue o aterrizaje, los resultados podrían ser desastrosos.


Afortunadamente existe una solución temporal para el problema y consiste en apagar y encender (reseteo) periódicamente los sistemas de energía del avión.

La compañía se encuentra trabajando en una actualización que corregirá la vulnerabilidad en el software, aunque aún no se ha emitido declaración sobre cuando estará disponible para ser instalada en los aviones.

Según los registros de Boeing, todos los jets de su flota han sido apagados y encendidos nuevamente como parte de la rutina de mantenimiento, motivo por el cual no hay peligro inminente de que una de sus máquinas pierda potencia en alguna de las fases del vuelo.

Esta reciente advertencia emitida por la FAA se suma a una larga lista de inconvenientes de los Boeing 787 Dreamliner. Un incendio en las baterías de una de estas aeronaves en 2013 mantuvo en tierra a toda la flota alrededor del mundo. Boeing fue declarada responsable de la falla por parte de las dos autoridades aéreas mas importantes de Estados Unidos, la FAA y la NTSB (National Transportation Safety Board).

En el 2012 expertos en seguridad determinaron que un chip defectuoso era vulnerable ante ataques hacker, algo que podía permitir el acceso remoto a los sistemas de las aeronaves. (elsol.com.ar / Repubblica)