martes, 26 de mayo de 2015

mayo 26, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 26 de mayo.- Este lunes por la noche, el Centro Cultural Olimpo fue sede del Primer Encuentro Inter Fe "Creemos en la Paz", evento organizado por la Comunidad Musulmana Ahmadía de México con el apoyo de la Dirección de Cultura del Ayuntamiento de Mérida y la participación de representantes de diversas religiones de la localidad.

Zulaikha Formosso, Guen Kelsang, Patricia Álvarez, David Vegue, Rubén Ponce y Waseem Sayed (foto: JMRM)

El foro, cuyo fin es promover la paz por medio de la educación y conocimiento de las verdaderas enseñanzas de las religiones presentes en Yucatán, contó con la presencia de centenares de personas.

La Maestra Guen Kelsang Chime, de la Comunidad Kadampa Budista, explicó que, según sus creencias, para lograr la paz interior es necesario abandonar los estados mentales negativos a través de la meditación, familiarizando la mente con actitudes positivas.

Añadió que los consejos de Buda marcan un camino para cultivar estos estados mentales y que todas las personas tenemos un potencial infinito de amor.

"Es muy bonito saber, reflexionar, que todos tenemos en el interior un potencial infinito de amor, compasión y sabiduría. Todos podemos experimentar paz, no hay un solo ser que no tenga ese potencial de experimentar paz interior. Lo único que tenemos que hacer es desarrollarla", indicó.

La Dra. Patricia Álvarez de la Cuadra, de la Oneness University, destacó la importancia de lograr la paz en el hogar.

"No podemos tener paz externa mientras no haya paz en el interior y esa paz empieza en la familia, empieza con nuestros padres, con nuestros hijos. Si no hay paz en el hogar, es imposible que tengamos paz en el mundo externo. Todos pedimos, rogamos a Dios porque nos dé paz en el planeta, que no haya guerras, pero hay guerra hasta dentro de nosotros porque no nos aceptamos como somos, porque todos queremos cambiar, porque no nos gusta ser lo que somos", dijo.

"La paz viene desde el punto de ver que todos somos uno, no importa lo que creamos ni lo que hagamos, todos conformamos una unidad", añadió.

"En la unidad está Dios, la unidad es de Dios, la religion la hemos hecho los hombres. Dios no es de una sola religión, Dios es de todos, de todas" dijo el Dr. David Vegue Corbacho, de la Iglesia Católica.

El ponente hizo referencia al Catecismo de la Iglesia Católica, que señala que cualquier persona que muere siguiendo su recta conciencia, aunque no estuviera bautizada, se salva y va al cielo.

"Si tú realmente, en tu interior, haces todo lo que crees que es lo mejor, eres una persona de bien y de Dios aunque no estés bautizado dentro de la Iglesia", remarcó.

El Señor Rubén Isaac Ponce Andrade, de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, abundó respecto al terrorismo internacional y el crimen organizado, que muchas veces intenta excusarse en base a supuestos mandatos divinos de una guerra cultural y religiosa.

"La inhumanidad del hombre para el hombre es nuestro mayor pecado", dijo citando a una de las fundadoras de su Iglesia.

"La paz duradera involucra por lo menos cuatro elementos... el diálogo, justicia, perdón y reconciliación", explicó Ponce Andrade.

El ponente destacó la preocupación de los adventistas por la justicia social, manifiesta a través del apoyo y la promoción de la libertad religiosa y por medio de organizaciones y departamentos de la Iglesia que trabajan para mitigar la pobreza y la marginación.

Aunque indicó que el perdón es necesario para reestablecer las relaciones rotas.

"Para que exista paz es vitar dejar los fardos del pasado, trasponer el suelo devastado por la guerra y empeñarse en la reconciliación... requiere el olvido de las injusticias violencias del pasado y más involucra el perdón que absorbe el dolor pero sin venganza", dijo.

"Es necesario algún tipo de perdón con el fin de romper el círculo vicioso de resentimiento, odio y deseo de venganza a todos niveles. El perdón... es contrario a nuestra naturaleza, lo natural para los seres humanos es la venganza, devolver el mal por mal, por tanto en primer lugar existe la necesidad de promover la cultura del perdón en nuestras iglesias", remarcó.

El Sacerdote maya Tiburcio Can May también abundó respecto a la paz y la reconciliación con Dios desde la perspectiva de guía espiritual indígena.

Destacó la importancia de las enseñanzas de los abuelos y aprender cómo se conectan con el universo, la madre naturaleza, la madre tierra y consigo mismos.

"Si nos unimos todos a pedir por la paz mundial les aseguro que se va a dar, les aseguro que más adelante nuestros hijos de nuestros hijos no van a sufrir esto que estamos sufriendo nosotros ahorita. Nuestros abuelos siempre cuidaban a la naturaleza, nuestros abuelos hablaban con los árboles, con las flores y con las plantas", recordó.

Waseem Sayed, de la Comunidad Musulmana Ahmadía, agradeció la participación de los demás líderes religiosos, recordando uno de los lemas de su fe: amor para todos, odio para nadie.

"Para establecer, difundir la paz y la armonía en el mundo se requiere más que solamente actuar con la justicia. En realidad la justicia, según el Sagrado Corán, es sólo el comienzo. Tenemos que hacer más si queremos lograr que la reconciliación y el amor entre a las personas. Tenemos que avanzar de la justicia a la benevolencia y hacer el bien a los demás... y luego tratar a los demás como si fueran parientes, amarlos como una madre ama a su hijo", explicó.

"El islam no monopoliza la salvación. El Sagrado Corán dice claramente, en el Segundo Capítulo, ciertamente los creyentes, los judíos, los cristianos, los sabeos y cualquiera de entre aquéllos que crea verdaderamente en Dios (hasta) el último día y haga buenas obras, tendrá su recompensa con su Señor y no les sobrecogerá el temor ni se afligirán", dijo Sayed.

El evento fue moderado por la Dra. Zulaikha Formosso y conducido por Noemí Rodríguez.

El acto, celebrado en el Auditorio "Silvio Zavala", también contó con la presencia de de Carlos Briceño Ramírez, subdirector de Gobernación del Ayuntamiento de Mérida; Elizabeth Vargas Aguilar, encargada de la Dirección de Asuntos Religiosos del Gobierno del Estado; Naseem Mahdi, vicepresidente nacional y misionero a cargo de la Comunidad Musulmana Ahmadía de los Estados Unidos y Noman Rana, imam de la Comunidad en Mérida.

Se hizo mención especial del apoyo brindado por el Dr. Irving Berlín Villafaña, Director de Cultura de la Comuna. (JMRM)