Mari Tere Menéndez Monforte
Me emocionó casi a las lágrimas ver el promocional que el PRI subió a su sitio y fue tal mi emoción que me dije a mí mismo ¿acaso estos señores del PRI nos creen unos tarados, unos retrasados mentales al escuchar todos los beneficios que nos traerán consigo de ganar sus candidatos?
Por un lado, que podrán ir al cine, al cual entrará uno, si acaso y el otro esperará a que salga para que le cuente la película, porque el costo del boleto es casi inalcanzable para la clase trabajadora.
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| No tienen vergüenza. (Enlace al promocional) |
Cuando dicen "podremos obtener una casa", yo les pregunto ¿cuál casa? ¿será un huevito o un pie de casa con un costo quizá de $200,000, mismos que se podrán pagar mientras el trabajo por contrato -totalmente anticonstitucional- lo conserven y no los haya alcanzado el recorte de personal?
Que los hijos nos dejen a los nietos; claro, para que los mantengamos, porque a los matrimonios nuevos apenas les alcanza, si es que les alcanza.
Que nuestros hijos se reciban en alguna profesión y lloremos más de angustia que de emoción cuando no encuentren trabajo, porque no lo hay, luego de tanto esfuerzo. Y si lo encuentran, ganar $6,000 mensuales, si bien les va. Eso y el escuchar que en el PRI quieren la felicidad, sí, la felicidad de todos sus sinvergüenzas candidatos, todos sus sinvergüenzas políticos que han robado a manos llenas el dinero de México.
Pregúntenle a los maestros si están contentos, pregúntenle a los pequeños comerciantes de las tienditas de la esquina si están contentos; pregúntenle a los empleados de PEMEX si están contentos con la reforma educativa, si están contentos con la reforma fiscal, si están contentos con la reforma energética.
Pregúntenle al Pueblo si están contentos con la impartición de justicia (Ayotzinapa).
Ese promocional en el cual se ve bajando las escaleras a una supuesta quinceañera es el ejemplo de la burla y por la altura de donde baja es un ejemplo del precipicio del cual estamos cayendo.
Y qué decir con ese plurinominal que le dan a la segunda dama del PRI, quien a manos llenas despilfarró el presupuesto del Estado, quien entregó un Estado prácticamente quebrado, endeudado, debiéndole a infinidad de proveedores; ah, pero eso sí, una flamante casa frente al mar en Telchac; propiedades, muchas de ellas con prestanombres. Un quinquenio de excesos. ¿Acaso no le fue suficiente para ahorita querer una diputación federal plurinominal y estar entre los tres primeros lugares para que le toque de manera casi automática? Señores lectores, es una burla, es una ofensa. Lo del Estado quebrado y las finanzas no yo lo digo, lo dijo el Secretario de Administración y Finanzas y resulta que al cabo del tiempo la Contraloría declara que las cuentas estuvieron muy bien y muy claras. Creo que se referían a las cuentas de un rosario de pésame, porque es la única explicación que se puede encontrar.
Lean los periódicos de esos tiempos, cuán grande fue la austeridad y el recorte que se hizo durante todo el primer año y casi el segundo, y hasta hoy con una austeridad a todas luces. Pregúntenle a todos los trabajadores de las secretarías cuán contentos están. Hasta a los mismos funcionarios se les ha escapado y han dicho que están en un estado terrible económicamente hablando. Qué, ¿no esa señora declaró hace unos meses que el PRI tendría carro completo? Cuando su responsabilidad es ver que los resultados se den como ella lo pronosticó y ya después de ver y evaluar su gestión y de acuerdo a los resultados que se obtengan pensar si la promueven para un cargo mejor o de plano enviarla a su casa.
Qué fácil cuando se está dentro es vivir de la mentecatada. Un Gamboa Patrón que durante seis sexenios sigue mamando de la ubre; un Manlio Fabio Beltrones por otro tiempo similar en cargos políticos, a veces como secretario, otras como legislador pero siempre, siempre, bebiendo de la ubre del Estado.
¿Y qué dicen del bisoño Wilbert Chi, que ahora es el delegado de la SEP en Yucatán? ¿Por cuántos años más seguirá?
Un Roberto Pinzón, que desde hace 30 años sigue y sigue recibiendo los beneficios de la política, por mencionar tan sólo a algunos, porque son tantos. Echeverría Navarro...
Pueblo de México y de Yucatán, tengamos memoria, lean a diario y entérense de la situación del país. Mientras la pobreza crece y se sigue acrecentando, los parásitos se siguen enriqueciendo, y eso, gracias a nosotros, gracias a esa gente que va y les vota y que una vez obtenido el voto se olvidan de su origen, se olvidan de por quiénes llegaron y para quiénes deben trabajar.
