lunes, 16 de febrero de 2015

febrero 16, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 16 de febrero  de 2015.- El incidente registrado el viernes pasado en el café Mi Viejo Molino, donde se le negó la entrada a una persona con discapacidad con un perro guía a pesar de que existen leyes que establecen que los establecimientos están obligados a darles acceso, no fue la simple negativa del gerente en turno, sino orden del dueño del negocio, quien en desacato y total desprecio de la legislación vigente dio la orden de que no se le permita el acceso al joven José Iván Caballero Cáceres, quien es sordociego, si este acude con su perro guía (labrador hembra de nombre "Praia"), según narró su hermana Fabiola.

José Iván Caballero Cáceres con "Praia", Greysi Mena Alejos, María Eugenia Cáceres Cabrera, Alvar Adrián May Can y Fabiola Caballero Cáceres. Delante los niños José Enrique y Ángel Alacio Caballero, sobrinos de José Iván (foto: JMRM)

José Iván, de 32 años de edad, padece el Síndrome de Usher, que trae consigo discapacidad visual y auditiva.

Actualización (18 de febrero de 2015): Mi Viejo Molino rectifica, dará acceso a Pepe y su perro guía

En entrevista concedida esta mañana a Libertad de Expresión Yucatán en el restaurante VIPs, su hermana Fabiola, quien dio a conocer el caso por medio de Facebook este fin de semana, narró que el viernes pasado llevarían a cabo una reunión familiar y para prevenir, porque ya ha habido varios establecimiento que le niegan el acceso, decidieron hacer una reservación anticipada en la sucursal de Mi Viejo Molino del norte de la ciudad.

El gerente dijo que lo platicaría con sus superiores, quienes a pesar de lo que marca la ley dispusieron que debido al tráfico de personas y a que no están "preparados para esa situación" el perro debería quedarse afuera.

"Cuando yo hablo a Plaza Dorada Dorada, a otra sucursal del mismo establecimiento, el gerente me dice que si hubiera sido por él los dejaría entrar... la situación es que esto es algo empresarial, ya todas las sucursales ya están avisadas de que si llega su hermano el perro se queda afuera, por orden del dueño", indicó la entrevistada.

"Se siente una impotencia, se siente un enojo, porque toda la familia estaba avisada. Finalmente logramos entrar a Sanborns, donde le dieron la entrada a mi hermano libremente y ya pudimos festejar con la familia, que era lo que queríamos, pero sí con este enojo", lamentó.

"Él se ha topado con varias negativas. A veces tampoco entre sucursales se comunican. Ahora mismo estamos en VIP's Las Américas y todavía el sábado el gerente de la sucursal en Gran Plaza le dice que si no podía quedarse el perro afuera", recordó Fabiola.

"Lo dejan entrar después, pero son muy molestos estos comentarios de que 'no puede pasar, es una mascota'. En Office Depot de Plaza Dorada él puede pasar libremente y en el del norte no lo dejan entrar", añadió.

La hermana de José Iván señaló que ya interpuso una queja ante la Conapred y que hará lo mismo ante la Profeco:

"Lo hice con la Conapred cuando el gerente se puso en contacto conmigo. Le dije que yo esperaba que esto se resolviera pronto porque a más tardar en una semana voy a poner mi queja en la Profeco", señaló, recordando que la Profeco le indicó que cualquier establecimiento público o privado que le niegue el acceso a su hermano puede ser clausurado.

Respecto a por qué ésta es la primera queja que interponen desde que José recibió el lazarillo en septiembre del año pasado, dijo:

"Porque finalmente lo dejaban entrar. En Plaza Altabrisa, cuando llegamos, les mostramos y explicamos la ley, lo dejaron entrar, mientras que aquí fue una negativa rotunda".

Fabiola Caballero pidió el apoyo de los medios para evitar que a su hermano le sigan negando la entrada a un establecimiento.

"Picando piedra"

La señora María Eugenia Cáceres Cabrera, madre de Pepe, recordó que él recibió el perro guía, de la escuela Leader Dogs, a través del Club de Leones Mérida Itzimná tras más de tres años de gestiones.

"Es el primer perro guía para un invidente en Yucatán y Pepe es el primer sordociego de toda Latinoamérica en recibir un perro guía", destacó.

Señaló que desde que inició el entrenamiento de César empezaron a tener problemas y que, inicialmente, se les negó la entrada en muchos lugares:

"No hay la cultura, no saben, no conocen, avanzábamos un poco y nos volvían a sacar", lamentó, indicando que los últimos meses han tenido que picar piedra para lograr que se respete el derecho de José Iván a acceder libremente a todos los establecimientos públicos y privados que requiera.

En la Codhey, indicó, le dijeron que no había los recursos para hacer las publicaciones con el fin de concientizar a la sociedad.

Opinó que son necesarias pláticas para concientizar a la sociedad sobre los derechos de las personas con discapacidad.

Doña María Eugenia también mencionó que también han tenido dificultades para utilizar el transporte público, indicando que les consta que también es común que se le niegue la parada a las personas con discapacidad en general.

La ley de su lado

La hermana de José Iván mostró un volante que incluye la fotografía de César con el perro guía y citas textuales de artículos de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la Ley para la Protección de los Derechos de las Personas con Discapacidiad del Estado de Yucatán y el Reglamento para el Control Sanitario y Protección de la Fauna Doméstica en el Municipio de Mérida que indican, categóricamente, que se le debe permitir el acceso a las personas con discapacidad acompañadas de sus perros guías en cualquier establecimiento.

Negocios que sí les han permitido el acceso

El restaurante Boston's, el supermercado Chedraui, las tiendas de autoservicio Extra y Oxxo, los restaurantes Sanborns y VIPs Las Américas, el supermercado Walmart, Plaza Altabrisa, Plaza Dorada, la Gran Plaza y Plaza Sendero son algunos de los establecimientos que no han discriminado a José Iván y sí han respetado la ley y sus derechos, según indicó la familia.

Mencionaron que actualmente José Iván está tomando un curso con la Asociación de Terapeutas Unidos con la Discapacidad para trabajar como masajista.

En el transcurso de las entrevistas, el perro guía permaneció sentado y de ninguna manera molestó a los clientes del restaurante ni causó desorden alguno. Esto, según explicaron los familiares, debido a su riguroso entrenamiento. (JMRM)